Ni la MUD ni los militares

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La crisis profunda y generalizada que vive el país está conllevando a ciertos sectores de izquierda y chavista a la confusión y al escepticismo y los conduce a plegarse a la cola de la oposición

Hay cierto sector que se autodefine «chavismo crítico y/o chavismo democrático» que se viene plegando a las propuestas del MUD en «nombre de la democracia» y olvidan no solo levantar las banderas de la revolución y el socialismo –el cual hasta ayer decían defender- sino que también «olvidan» que precisamente quienes hoy llaman a «defender la constitución» ayer no solo convocaron abiertamente a desconocerla sino que con su accionar han mostrado sus garras fascistas. Sin duda, la crisis profunda y generalizada que vive el país está conllevando a ciertos sectores de izquierda y chavista a la confusión y al escepticismo y los conduce a plegarse a la cola de la MUD. Lo que les falta a estos «camaradas» es que públicamente aplaudan la cayapa internacional que encabezan Uribe, Pastrana, Fox, Quiroga, Trump, entre otros –no contra el gobierno de Maduro- sino contra la revolución y el socialismo.

Hay que agruparse, reagruparse, en función de construir un gran bloque nacional que construya un programa de lucha y acompañe al pueblo bolivariano en su lucha diaria contra la especulación, la delincuencia, por la defensa del salario, contra la liberación de precios, en defensa del ambiente y para develar, sin temor, la gran estafa histórica que en nombre del socialismo está desarrollando el gobierno neoliberal de Maduro-Diosdado-JorgeRG, que con una retórica antimperialista y apropiándose de los símbolos, los códigos y claves de la izquierda revolucionaria entrega los recursos mineros, petroleros y destruye el ambiente. En una palabra, el trío que encabeza la camarilla reaccionaria militarista del gobierno de la gran estafa y el saqueo le pone en bandeja de oro la soberanía nacional al imperio norteamericano, a los rusos y a los chinos, con el objetivo supremo de mantenerse «como sea» en el poder.

No es hora de vacilar ni de colocarse a la cola de la MUD. La tarea del militante revolucionario hoy es desenmascarar esta estafa histórica encabezada por el trío militarista, y contribuir de distintas maneras a levantar y a reanimar al movimiento popular venezolano, edificar un gran frente o bloque popular revolucionario que levante sin miedo, sin complejos, las banderas de la revolución y el socialismo. Navegar a la cola de la MUD es ahogarse en la putrefacción y contribuir al desconcierto y a la confusión de la mayoría del pueblo no polarizado que aún sigue creyendo en la agenda bolivariana alternativa que dignamente levantó Hugo Chávez el 4F de 1992, con lo cual reanimó y fortaleció las esperanzas del pueblo bolivariano.

Vamos, compa, carajo, que para luchar por la revolución y el socialismo no hace faltan gallinas sino cantar de gallos.

Que no muera el amor, la fe, la esperanza ni el combate.

Con alegría revolucionaria hay que agruparse, reagruparse, para acompañar al pueblo bolivariano en lucha.

Levantemos la unidad de la izquierda revolucionaria para no ser cola de la MUD ni cómplices de la estafa del trío militarista.

Roberto Sarare Quirife

aporra.org

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