El coordinador nacional político de Voluntad Popular en situación de exilio forzoso, Carlos Vecchio, denunció ante la Organización de Estados Americanos (OEA) la existencia de un exterminio político en contra de todos aquellos venezolanos que se han opuesto públicamente al régimen de Nicolás Maduro. Recordemos que la organización internacional está llevando a cabo una serie de audiencias públicas para armar un expediente sobre la violación sistemática de los derechos humanos en Venezuela.
Como primer ejemplo, Vecchio citó al actual vicepresidente Tareck El Aissami. “Hablaré hoy del caso de Voluntad Popular, pero quiero aclarar que mucho de lo que ha sucedido a la tolda naranja ha acontecido a nuestros partidos hermanos. Y para dejar claro el mensaje de mi participación desde el inició citaré al vicepresidente Tareck El Aissami, quien dijo que todos los militantes e integrantes de Voluntad Popular son fascistas; no son demócratas y mucho menos seres humanos, distan mucho de ser seres humanos y la justicia les va a llegar. Aquí pudiéramos leer que todos los venezolanos que se oponen al gobierno son fascistas y no seres humanos”.
Vecchio destacó el caso de Voluntad Popular como un ejemplo de la persecución sistemática que ha llevado a cabo el régimen de Nicolás Maduro contra toda la oposición política, a quienes de acuerdo con el discurso de Tareck El Aissami se les considera menos que seres humanos. “En Voluntad Popular hemos tenido que recibir ataques permanentes de altos funcionarios del Gobierno. Hablo de Nicolás Maduro, hablo de Tareck El Aissami, hablo de Diosdado Cabello; quienes dicen que mi partido está involucrado en la guerra económica, en actos de desestabilización e incluso terrorismo. Esto se traduce en ataques a nuestra sede, allanamientos ilegales, arrestos arbitrarios e incluso amenazándonos constantemente con la ilegalización”.
Señaló que acorde a la visión del régimen se usan todos los Poderes Públicos y las herramientas a disposición del Estado para exponer constantemente a la dirigencia opositora al odio. Asimismo, destacó que todo el poder del Estado se encuentra subordinado a los designios de Nicolás Maduro y la alta cúpula del régimen.
“Diariamente usan todo el poder del Estado para exponernos al odio, usan los Poderes Públicos para perseguir a quienes piensan distintos. En Venezuela cuando Nicolás Maduro da la orden puedes asumir que eres culpable y que los jueces se inventarán la sentencia. Puedo mencionar no solo el caso de Leopoldo López que es el más emblemático, sino también el de Daniel Ceballos, Delson Guarate, Gilber Caro que es diputado. Pero tampoco podemos olvidar a los fallecidos como Cesar Pereira, como Geraldine Moreno, como los más de 100 muchachos que fallecieron por protestar pacíficamente”.
Para demostrar esta situación ante los expertos de la OEA relató la situación que le llevó a asumir el exilio y el drama humano que viven todos aquellos venezolanos que se han visto obligados a abandonar el país en contra de su voluntad. “Voluntad Popular es un partido profundamente democrático, porque tenemos una visión fundamentando en la defensa de los derechos de todos los venezolanos. Siempre hemos actuado dentro de la Constitución y bajo el lema de la no violencia. Debo decir que a mí no me ha sido fácil llegar aquí, como no ha sido fácil para ninguno de los perseguidos por el régimen de Nicolás Maduro”.
Recordó que el proceso inició cuando en el 2014 Voluntad Popular advirtió a todos los venezolanos que si continuaba el régimen el país entraría en una crisis humanitaria como la que actualmente enfrenta Venezuela. “Nuestro primer acto fue una marcha masiva el 12 de febrero, donde lamentablemente fallecieron dos jóvenes venezolanos e inmediatamente sin investigar todos los voceros del régimen lanzaron sendas acusaciones contra Leopoldo López. Bastó con una investigación periodística para demostrar que los asesinos eran funcionarios del Estado, pero el régimen continuó con su persecución y cinco días luego de que se acusara a Leopoldo López el régimen me imputó los mismos cargos. La misma jueza que ordenó la captura de Leopoldo López firmó mi orden de captura por órdenes de Nicolás Maduro”.
Relató que tras la emisión de la orden de captura la sede de Voluntad Popular fue allanada en varias ocasiones y tras varias amenazas tuvo que asumir la clandestinidad para nunca más volver a su hogar pese a que su esposa llevaba varios meses de embarazo. Indicó que pese a que no está físicamente preso como muchos venezolanos si se siente preso del alma, puesto que no ha sido capaz de pisar Venezuela desde entonces.
“En esos cinco días Voluntad Popular fue víctima de una persecución brutal, donde el 17 de febrero nuestra sede fue víctima de tres ataques armados y violentos. Recuerdo que tuve que salir en la maleta de un carro, para huir de un despliegue militar como no había visto nunca y con mi esposa embarazada tuve que asumir la clandestinidad. Más nunca he podido regresar a mi casa, y desde entonces mi temor era mi esposa, mi hijo. Temía perder a mi familia, porque recibía mensajes que decían que tenían orden de disparar, que sabían dónde daría a luz mi esposa. Es por eso que en pleno siglo XXI tuve que tomar la decisión de abandonar mi país por razones políticas. Quizás no estoy preso físicamente como mi hermano Leopoldo López, pero los exiliados estamos presos del alma, porque no podemos estar donde queremos estar”.
Junto a su caso relató que actualmente existen 28 presos políticos pertenecientes a Voluntad Popular y cientos de ciudadanos que sufren el mismo destino únicamente por su posición política. “Son 28 dirigentes de Voluntad Popular presos mientras hablamos, pero junto a ellos hay dirigentes de otros partidos y ciudadanos comunes que sufren el mismo nivel de tortura y malos tratos. Leopoldo López está ahora en su casa, pero durante el tiempo que estuvo preso en Ramo Verde estuvo aislado un año en un edificio sin poder recibir siquiera su visita familiar».
Destacó el caso de dos diputados, Rosmit Mantilla y Gilberto Sojo, «quien estuvo tres días colgado como un cristo en la cárcel de El Helicoide para que confesara y culpara a Leopoldo de actos violentos. Si ninguna orden legal arresta a nuestra dirigencia y los someten a estos tratos”, explicó.
El dirigente finalizó asegurando que consignará a la Organización de Estados Americanos un informe de 300 páginas donde se relata caso por caso la persecución de la que ha sido víctima la tolda naranja. Asimismo, hizo un nuevo llamado a la Comunidad Internacional para que interponga sus buenos oficios de manera que el régimen se vea incapaz de continuar el exterminio político que ha mantenido hasta ahora. “Consignaré un informe el día de hoy con 300 páginas donde se detallan todos los abusos y violaciones a los derechos humanos nada más en mi partido. Pero se pueden aplicar fácilmente a las demás organizaciones políticas. Lo que se está viviendo en Venezuela no se ha visto en ningún rincón de América salvo en Cuba. Estamos ante una dictadura que se ha propuesto la eliminación sistemática de toda oposición política y eso solo llevará a que se profundice la crisis política y social. Esta política de exterminio político debe ser rechazada por todos los demócratas, para que millones de venezolanos pueden cumplir con el anhelo de nacer y morir en una tierra libre”.
Recordemos que de acuerdo al Estatuto de Roma, documento legal que rige la Corte Penal Internacional, es un crimen de lesa humanidad la “persecución de un grupo o colectividad con identidad propia fundada en motivos políticos, raciales, nacionales, étnicos, culturales, religiosos, de género definido en el párrafo 3, u otros motivos universalmente reconocidos como inaceptables con arreglo al derecho internacional”.
