Como otro “engaño electoral” califican los usuarios de la carretera Panamericana las promesas hechas durante la campaña y tras ganar la gobernación del actual gobernador Héctor Rodríguez sobre la reparación de la referida arteria vial.
Buena parte de la carretera permanece esperando asfalto, luego que fuera escarificada en el mes de septiembre. “Van a paso de morrocoy y lo poco que han asfaltado quedó fatal”, reseñó Víctor Bolívar, residente del barrio Francisco de Miranda, ubicado a orillas de la vía.
En el tramo correspondiente a Los Salias la llamada recta de Las Minas sigue siendo escenario a diario de extensas colas en ambos sentidos, especialmente frente al centro comercial Galería Las Américas donde enormes huecos impiden al transporte público utilizar la parada.
A pocos metros un bote de aguas obliga a los conductores a bajar la velocidad, mientras que la falta de mantenimiento de las cunetas es evidente. “Prometieron miles de ojos de gato, un pocote de toneladas de asfalto, bombillos y pintura y hasta ahora nada de eso”, agregó Lisset Vargas, usuaria diaria.
Agrega que lo más increíble es que aún permanecen sin semáforos la entrada a Corralito y Montaña Alta, “en abril se cumple un año que se dañaron y nadie hace nada, ni hablar de las pasarelas que están literalmente guindando”, dijo.
Daniel Murolo