Voces de la Academia: El Encantado, la primera central hidroeléctrica de Venezuela se construyó en El Hatillo

Existe una creencia popular que dice, que a un lugar se le llama encantado cuando allí se asienta un encanto, en el que ocurren cosas milagrosas, es un área mágica, de ahí viene el nombre que recibe esta planta hidroeléctrica.

El Encantado fue la primera planta hidroeléctrica de Venezuela y de América Latina y la segunda del mundo en su estilo. Se empezó A construir en 1895. Esta fue una obra de la Compañía Anónima La Electricidad de Caracas, fundada el 12 de noviembre de 1895.

La estación, El Encantado, se encontraba localizada al este de El Hatillo, estado Miranda, al pie del Peñón de las Guacas y en la zona conocida como el Cañón del río Guaire.

Es así como el 8 de agosto de 1897 se inaugura El Encantado, dicha planta fue instalada sobre el río Guaire que atraviesa Caracas. Ese día fue una feliz ocasión que contó con la asistencia del presidente de la República de ese entonces, el general Joaquín Crespo y varios de sus ministros, entre ellos el ministro de Obras Públicas, Juan Uslar hijo, y otras personalidades. La comitiva había partido desde la estación del Ferrocarril Central en Caracas hacia El Encantado, en dos trenes preparados para este evento.

Las turbinas se pusieron en movimiento a la vista de los espectadores y en el acto se difundió la luz por los salones

Altos y los subterráneos del sólido edificio. Esa noche quedó iluminada por primera vez la avenida Este, para que los caraqueños pudieron asistir a la fiesta de inauguración  del Encantado, lograran disfrutar también del espectáculo y dar testimonio de que el manso Guaire se había convertido en generador de la preciosa luz eléctrica.

El mérito de esta construcción le corresponde al ingeniero venezolano Ricardo Zuloaga, quien con esta obra se colocó entre los pioneros de la electricidad a nivel mundial.

La planta de El Encantado tenía una capacidad instalada de 240 Kilovatios y estaba dotada de dos turbinas de fabricación suiza, de eje vertical, propulsadas por agua conducida por una larga tubería, desde una represa más arriba en el río Guaire, con una diferencia de altitud de 36 metros.

La planta poseía una sola línea de 5.000 voltios que transmitía y distribuía la corriente a Caracas. Esta central estuvo en servicio hasta el año de 1911, cuando se sustituyó por un solo generador de 400 kilovatios.

Más tarde Ricardo Zuloaga construyó una segunda planta, unos kilómetros más debajo de El Encantado, en Los Naranjos, donde se usaron tres turbinas de 640 caballos de fuerza, acopladas directamente a un alternador Brown Boveri de 438 kilovatios, lo que representaba un total de 1920 caballos de fuerza, equivalentes a 1.314 kilovatios en vez de los 420 KW que producía El Encantado, es decir 4 veces más. Lo cual se debía a la diferencia del nivel en la caída del agua en Los Naranjos, que era de unas 5 veces más grande, es decir de180 m.

Luego, al dejar de funcionar la planta, este lugar se convirtió en un sitio de visita de excursionistas y curiosos, hasta que en los años sesenta surgieron problemas de inseguridad en el terreno y se cerró el acceso al mismo. Quedando hoy en día sólo ruinas de aquel encanto que los maravilló a todos.

 

María Virginia Valera Zerpa

Academia de la Historia del Estado Miranda

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