Representantes estudiantiles de 35 universidades del país se reunieron en el Aula Magna de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) para manifestar su respaldo a la marcha convocada por Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional (AN), prevista para el 16 de este mes. En el marco de la presentación de la Confederación Venezolana de Estudiantes (Confev), los voceros estudiantiles insistieron en defender la autonomía universitaria, amenazada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) mediante la sentencia 0324.
Zuleika Meneses, presidenta de la FCU de la Universidad Experimental del Táchira (UNET), explicó que la confederación es el resultado de tres meses de diálogos y planificación en todas las regiones del país: Centro, Andes, Llanos, Sur, Oriente, Occidente y Capital. Las 35 casas de estudios tienen como último fin enfrentar a Nicolás Maduro y lograr un cambio político, porque solo así, asegura Meneses, podrán recuperar la academia. “El gobierno está acabando con las universidades”, dijo.
Resalta el esfuerzo por la organización y admitió que muchas veces la falta de claridad y objetivos comunes concretos, generó indiferencia y rechazo del alumnado hacia sus líderes: “La organización genera confianza. No con palabras, con acciones”.
Jonathan Carrillo, de la UCV, precisó que uno de los objetivos específicos para defender la autonomía universitaria, amparada por el artículo 109 de la Constitución, es lograr elecciones de centros de estudiantes en la Universidad del Zulia (LUZ), en la Universidad de los Andes (ULA) y en la Universidad de Oriente (UDO), en las que no se ha cambiado de dirigencia estudiantil por coacción de grupos afectos al chavismo.
Asunto de la ciudadanía
Salir a protestar por la educación es un deber de toda la ciudadanía. Por eso, Daniela Tirado, presidenta de la FCU de la Universidad de Carabobo (UC), insiste: “Los problemas de las universidades no son solo de las universidades, son de todos los venezolanos”.
Además, afirma estar 90 % segura de que la población apoya a sus estudiantes. “El sueño de toda familia es que haya, por lo menos, un profesional, por eso el sueño de un joven que llega a la universidad es también el sueño de sus padres. Por eso nuestra lucha es la lucha de todo el país”, dijo.
Además, Tirado confía en que la articulación de las 35 instituciones ejerza la presión suficiente sobre el gobierno como para generar un quiebre y aseguró que solo los grandes grupos logran cambios importantes dentro del sistema.
“Si se meten con una universidad, se meten con todas”
Felipe Toro, consejero de escuela de Comunicación Social de la UCAB, considera que ninguna universidad es más importante que otra, por eso, dentro de la Confev, hay igual poder de decisión para las públicas, privadas y experimentales. “Las universidades de Caracas, históricamente, se han tomado la atribución en las luchas políticas, pero con esta organización se quiere acabar con la centralización”, expresó.
En su último año de estudios de pregrado, Toro espera que su compromiso con el movimiento estudiantil sea un ejemplo para otros jóvenes. Cree que falta comunicación entre la dirigencia y el alumnado para calar completamente. Por eso es enfático cuando dice que es necesario que cada universitario se involucre con la confederación. “Es un problema de todos. Si se meten con una universidad, se meten con todas”, manifestó.
Presupuesto para un mes
En 2020 tampoco habrá planificación presupuestaria posible para las casas de estudios del país. “Si fue difícil 2019, el año 2020 será mucho peor de lo que hemos vivido en la universidad”, indicó Mariella Azzato, vicerrectora administrativa de la Universidad Simón Bolívar (USB).
La asignación que dio el Ministerio de Educación Universitaria a través de la Oficina de Planificación del Sector Universitario (OPSU), correspondiente al presupuesto ley, no superó en muchos casos ni 10 % de lo solicitado por las universidades.
A la USB se le aprobó solo 6 % de lo requerido. La situación de la Universidad Central de Venezuela (UCV) no es diferente. Para 2020, del presupuesto ley, la cuota asignada fue 9,8 % de lo solicitado, muy lejos de las necesidades reales que mantienen las dependencias de la UCV. Mientras que el de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL) fue 0,03 % de los solicitado, dijo el rector Raúl López Sayago. En el caso de la Universidad de Carabobo, apenas 3,98 %. “Hay una contracción muy fuerte”, añadió Azzato, al comparar lo asignado para 2020 con lo de 2019, que fue 13 %. “Durante muchos años hemos estado viviendo de créditos adicionales enviados a discreción. Avizoramos que será más dramática la situación”.
Azzato piensa que los recursos estipulados a lo sumo alcanzarán para un mes. Agregó: “No hay planificación posible a 12 meses”. Los gastos de funcionamiento de 2019 excedieron los 3000 millones de bolívares.
María Jesús Vallejo/El Pitazo