Tras dos años de asumir la Alcaldía de Carrizal por el oficialismo, el coordinador municipal de Voluntad Popular, Carlos Javier Arencibia, asegura que la gestión ha sido «puro circo».
«A pesar de que el alcalde pretende esconderse de su carácter madurista, porque hasta a él le da pena admitirlo, no puede negar que su gestión ha sido tan nefasta como la del régimen de Maduro. Las necesidades de la gente empeoran cada día sin que haya respuesta de una autoridad local que se dedica a huir de sus responsabilidades y achacarselas a otros», dijo.
Responsabiliza a la alcaldía por las deficiencias en materia de servicios públicos, vialidad, inseguridad, salud e infraestructura.
«Hay comunidades con meses sin agua y, en vez de ponerse al frente en el reclamo a Hidrocapital, se hace el loco; pusieron unos faroles de mala calidad y el municipio quedó a oscuras; acabaron con el servicio de ambulancias, remodelaron el ambulatorio pero no atienden a nadie; los policías cobran mal y no actúan planificadamente, por lo que el secuestro y robo de quintas sigue en aumento; en fin, estamos peor que nunca», sostiene.
Para Arencibia, Carrizal cuenta con las potencialidades para convertirse en una ciudad pujante hacia el desarrollo. «Con un uso responsable y sostenible de recursos, planificación estratégica y voluntad política, podemos superar los problemas y dar un paso hacia la modernidad, pero para ello hay que salir de la usurpación en todos sus niveles», concluye.