El dirigente del partido Redes, Juan Barreto, consideró que al líder parlamentario, Juan Guaidó, le llegó «su tiempo histórico» y que actualmente alcanza solo el 9% de la popularidad. Dice que Nicolás Maduro está en 7%.
«A Juan Guaidó le llegó su tiempo histórico y lo que está dando son pataletas desesperadas, además, esta salida (al exterior) coincide con el 23 de enero de 2019, cuando hizo una oferta engañosa. Un año después, ¿cómo estará la gente, cómo sentirán esos miles de venezolanos que de manera sincera fueron a darle su apoyo? (…) Él tiene en este momento el 9%, el presidente Maduro tiene el 7%, juntos no llegan al 20. Y por fuera, un 80% pidiendo cambio y rechazando a los dos factores extremos de la polarización», señaló Barreto.
En ese sentido, afirmó que para él, el presidente de la AN es que el resultó electo en Palacio Federal Legislativo, Luis Parra, «porque hay un hecho incontrovertible, que es que hubo una elección».
No obstante, dijo que será el TSJ ligado al oficialismo el que podrá dirimir la situación, e instó a «confiar en las instituciones» aunque «no estemos de acuerdo». «Eso va al TSJ, que ellos decidan», dijo.
También negó que hagan falta nuevas elecciones dentro de la AN y subrayó: «el Sr. Guaidó perdió. Perdió una elección, la mayoría y un tercio de quienes lo acompañaban, se fueron».
Consideró que a Guaidó «se le está dando una cucharada de su propia medicina. Esa acción que ha venido desarrollando la oposición de crear una táctica de espejo, hoy se le revierte a Guaidó cuando aparece una nueva AN» en manos de Parra, quien contó con toda la bancada chavista para su presunta elección.
«Guaidó no ha tenido la capacidad de convocatoria para defender lo que él dice que es lo legal. Pierde la calle, el escenario de la AN, y se va a al exterior porque sabe que se cumplirá un año de la movilización del 23E, donde sembró una esperanza pero sobre la base de una oferta engañosa, inmediatista y si hoy hacemos un balance, no ha logrado nada», insistió, entrevistado en Primera Página.
Corrupción
Barreto aprovechó para señalar a Guaidó de ser un «convicto y confeso» de un delito que involucra «cientos de miles de millones de dólares», haciendo referencia al dinero que, según él y el gobierno, fue entregado al diputado.
Sobre los señalamientos a Parra y otros diputados que le acompañan igualmente por corrupción, se limitó a mencionar que «es muy grave y tiene que investigarse», y que «todo el mundo es inocente hasta que se demuestre lo contrario».
«Caso distinto a Guaidó que es convicto y confeso, ha recibido dineros, lo dijo la Usaid, no Juan Barreto, ante el Congreso de EEUU, donde reconoce que le ha entregado a Guaidó 128 millones de dólares para distintos programas. La CRBV expresamente prohíbe que los políticos reciban dinero del exterior. Eso en Venezuela es un delito y para los EEUU, son fiscales, jueces y verdugos. Y en este caso, Guaidó es convicto y confeso de un delito que involucra cientos de miles de millones de dólares porque hay onanismos internacionales europeos, otras fundaciones internacionales, la vaca que le hicieron (Iván) Duque y (Sebastián) Piñera cuando lo pasearon como reina de carnaval por América Latina», señaló.
Del gobierno no hay que hablar
Barreto también señaló al gobierno socialista de Nicolás Maduro, y dijo que no hay ni que hablar de él, por ser «el peor que ha tenido Venezuela en la historia cívico-republicana, es corrupto, descompuesto, incapaz; que ha optado por una deriva salvajemente autoritaria; volver sobre esa cantaleta no tiene sentido».
Afirmó que la solución a los problemas del país pasa porque se acabe el gobierno madurista, «pero el cómo es importante. ¿Saldrá de una intervención que deje una guerra civil o con un golpe de Estado? Tiene que ser por la vía pacífica y democrática, aunque sea más difícil y haya que convencer a la gente de que este es el camino».
«El gobierno es hoy una deriva burocrática autoritaria que trata de preservar el poder al costo que sea, independientemente de cualquier circunstancia y eso le ha llevado a salirse de la Constitución. Es por eso que los demócratas debemos elegir la vía democrática», insistió.
Aseguró que el «cambio» está a punto de producirse si la gente «toma consciencia de que tiene en sus manos el poder del voto», para seguidamente indicar que espera que en las elecciones parlamentarias de este año se impongan los independientes y se le abra un «boquete a la polarización».
