Lunes, 23 de marzo 2020
Guarda tu corazón
En el libro de Proverbios, capitulo 4, versículo 23 podemos leer: “Sobre todas las cosas, guarda tu corazón, porque de él mana la vida”.
El corazón es el motor de nuestro cuerpo y es por ello que los médicos insisten en la necesidad de llevar una vida saludable.
Sin embargo, Dios nos alerta del cuidado al corazón, no solo en su aspecto físico, sino en su aspecto espiritual.
Veamos por qué: “Porque de adentro, del corazón humano, salen los malos pensamientos, la inmoralidad sexual, los robos, los homicidios, los adulterios, la avaricia, la maldad, el engaño, el libertinaje, la envidia, la calumnia, la arrogancia y la necedad. Todos estos males vienen de adentro y contaminan a la persona”.
Marcos 7:21-23.
Veamos este otro texto bíblico: “….la gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón”,1ª Samuel, capitulo 16, versículo 7.
Aquí nos damos cuenta que para el Señor, las condiciones físicas no son importantes porque estas desaparecerán algún día, mientras que los que hagamos delante de Él será lo que tome en cuenta cuando nos toque presentarnos delante de su presencia.
El Profeta Jeremías dice en el capítulo 17, versículo 9: “Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?”.
Y Dios le responde en el versículo 10: “Yo, el Señor, sondeo el corazón y examino los pensamientos, para darle a cada uno según sus acciones y según el fruto de sus obras”.
A Dios le interesa mucho nuestro corazón, porque ese órgano define quien eres en realidad y Dios es el único que puede saberlo.
¿Cómo está tu corazón delante de Dios?.
Ser cristiano no es profesar una religión, es tener una relación personal con Jesucristo como Salvador y Señor de nuestra vida.
Dios te bendiga y te guarde, hasta el próximo encuentro con La Palabra de Dios.
Lic. Beatriz Martínez (CNP 988) [email protected]
