**El desarrollo de actividades de esparcimiento, deportivas y recreativas, así como el acceso a la salud es parte de lo que deben enfrentar las personas de la tercera edad quienes piden retornar y reabrir Casas del abuelo en el municipio Carrizal**
La enfermedad por COVID-19 afecta a personas de todas las edades y no está aislada de ningún origen étnico, estrato socioeconómico o género. Sin embargo, con el paso del tiempo se ha evidenciado que las personas mayores constituyen un grupo especialmente vulnerable frente al virus por lo que son los que más cuidados ameritan para prevenir su contagio, siento esta la razón por la que viven mayor tiempo de encierro y han tenido que restringir de sus actividades diarias rutinaria para el beneficio de su salud y bienestar emocional.
Julio Díaz, director de la Fundación para el Buen Vivir (Fundavivir) del municipio Carrizal, se reunió con representantes de los más de 40 clubes de abuelos que hay en el municipio para retomar algunas actividades recreativas para los abuelitos. “Nuestra idea siempre ha sido el bienestar de las personas de la tercera edad, como parte de los lineamiento del alcalde Farith Fraija, quien se ha comprometido con el desarrollo de todas las actividades que se desarrollan en la fundación”, dijo.
Abuelitos de sectores de Barola, Montañalta, José Manuel Álvarez, casco Central y Brisas de Oriente comenzarán a desarrollar actividades en sus sedes para mantener su bienestar.
Jenny Ahumada, presidenta de Fundavivir, agregó que “siempre cuidaremos de nuestros abuelos, porque es parte de nuestra misión y compromiso, por eso bajo las medidas de bisoegrudiad esta semana de flexibilziación arrancamos con actividades en las que participan cinco abuelitos en promedio para que tengan un escape al encierro que ha significado la cuarentena por la pandemia”, dijo.
Entre las jornadas a realizar se activarán los talleres de manualidades, tarde de domino, entrenamientos y otros cursos para que tengan algunas ocupaciones. “Entendemos la necesidad de cuidar de ellos y no exponerlos a contagio, pero creemos que es necesario ofrecerle estos pequeños momentos de esparcimiento para frenar su deterioro do en casa, sin tener rutinas y sin poder disfrutar de caminatas o salidas en familia”; finalizó Ahumada.