El enviado de la ONU en Siria abrió este jueves en Ginebra negociaciones de paz apelando a la «responsabilidad histórica» de todas las partes, pero con pocas esperanzas de una resolución rápida del conflicto.
«Tienen la oportunidad y la responsabilidad histórica de poner fin a un conflicto sangriento», declaró Staffan de Mistura, expresándose ante los bandos enemigos sirios, la delegación del régimen de Damasco y de la oposición, cara a cara en la misma sala del Palacio de Naciones de la ONU.
«El pueblo sirio quiere desesperadamente el fin de este conflicto y todos ustedes los saben» añadió.
Staffan de Mistura mantuvo primero reuniones bilaterales separadas en Ginebra con los delegados del régimen y de la oposición para fijar el formato y la agenda oficial de una nueva ronda de negociaciones para poner fin al conflicto que empezó en 2011.
El Alto Comité de Negociación (ACN), liderado por Nasr al Hariri y que representa a la oposición, dijo el miércoles que quiere negociaciones directas con el régimen, cuya delegación encabeza Bashar Jafaari.
Desde su llegada a las oficinas de la ONU en Ginebra, ambas delegaciones todavía no han tenido contacto directo.
Una fuente opositora bajo anonimato explicó a la AFP que hay divergencias sobre el peso de delegaciones opositoras, puesto que además del ACN, hay opositores provenientes de El Cairo y Moscú.
AFP