
Los ambulatorios de la capital mirandina no escapan a la falta de fármacos que azota al país, han tenido que indicar medicinas sin esteroides para solventar la crisis de acetaminofén. Autoridades aseguran que los anticonvulsivos no le llegan a todos, solo a los que trabajan 24 horas y en pequeñas cantidades. Con los anticonceptivos pasa lo mismo, son distribuidos a los centros que tienen control familiar o de niño sano.
Los especialistas instan a las autoridades a encarar el problema que se está saliendo de control.
Moisés Mercado – [email protected] / @MoisesMercado