La supermodelo brasileña Gisele Bündchen ejerce desde 2009 como embajadora de buena voluntad del Programa de las Naciones Unidas para el Medioambiente, cargo con el que ayer renovó votos para los próximos siete años mientras oficiaba la entrega de los premios Champions of the Earth en Nueva York.
Comprometida con esa naturaleza desde su infancia, hoy juntó glamour y sostenibilidad en el Museo de Historia Natural de Nueva York como madrina de la ceremonia de entrega de estos premios que reconocen las aportaciones públicas y privadas a la ecología y en cuyo cuadro de honor de 2013 se encontraban la ministra de Medioambiente de Brasil, Izabella Teixeira, y la activista mexicana Martha Isabel Ruiz Corzo.
Bündchen, que compartía con su expareja Leonardo DiCaprio la inquietud por cuidar el planeta Tierra, hoy lució un vestido naranja corto, melena suelta y derrochó simpatía y vigor para defender su causa en una gala que terminó en baile.
Recordó que un 40 por ciento de la comida en Estados Unidos queda sin consumir mientras una de cada siete personas se acuesta con hambre en el resto del mundo y llamó a una actitud responsable por parte de los ciudadanos de Nueva York y del mundo.
La supermodelo brasileña charló ayer con Ruiz Corzo y con Teixeira y también posó con los niños ganadores de los premios del 22 concurso de dibujo infantil del Programa de las Naciones Unidas para el Medioambiente (UNEP en sus siglas en inglés), entre los que se encontraba el colombiano de doce años Juan David Díaz Manrique, ganador en la categoría de Latinoamérica y Caribe.
Bündchen, que en los últimos años asume la presencia estelar de esta gala anual, empezó a colaborar activamente con las causas de protección de la naturaleza hace diez años, cuando pasó unos días con la tribu en el río Xingu, de la selva amazónica, y fue consciente del alarmante impacto ecológico que esta zona sufre.
Agencias