El primer ministro británico, David Cameron, dijo ayer en el Parlamento que estudiará que el Reino Unido acoja a algunos de los refugiados sirios en respuesta a las peticiones de la oposición laborista
LONDRÉS. El primer ministro británico, David Cameron, dijo ayer en el Parlamento que estudiará que el Reino Unido acoja a algunos de los refugiados sirios «más vulnerables», en respuesta a las peticiones de la oposición laborista.
En la sesión semanal de preguntas y respuestas en la Cámara de los Comunes, el jefe del Ejecutivo enfatizó que el Reino Unido está a la cabeza mundial en materia de ayuda humanitaria a Siria y consideró que este país cumple sus «obligaciones morales» hacia los sirios.
No obstante, en respuesta a la oposición laborista, Cameron accedió a estudiar de nuevo los casos de «personas que no pueden estar en campos de refugiados, pues bien han quedado discapacitadas por los ataques o en circunstancias muy difíciles».
«Estoy de acuerdo en estudiar ese argumento. El Reino Unido siempre ha desempeñado el papel correcto en estas crisis humanitarias desesperadas», afirmó.
Los laboristas de Ed Miliband instaron sin éxito al jefe del Gobierno a que se comprometa a firmar el sistema de cuotas de refugiados sirios alcanzado en octubre de 2013 por 17 países, propuesto por la ONU para aliviar la crisis.
En este sentido, Cameron opinó que «un pequeño sistema de cuotas no puede resolver el problema de los refugiados sirios» y recordó que el Reino es el segundo país donante de ayuda.
«El dinero que los contribuyentes británicos aportan proporciona alimento y cobijo y agua y medicinas para cientos de miles de personas. También cumplimos con nuestras obligaciones en cuanto a ayudar a los que buscan asilo, porque ya hemos admitido más de mil refugiados sirios en los últimos meses», afirmó.
El jefe del Ejecutivo sostuvo durante su comparecencia que «no se puede solucionar una crisis de refugiados de esta escala con casi la mitad de los nueve millones de sirios, que o bien están desplazados o bien corren el riego de desplazamiento, con un sistema de cuotas donde los países aceptan a unos cuantos centenares de refugiados».
Agencias
