
Aseguró que la situación es de extrema gravedad porque sólo en el tramo de la avenida Víctor Baptista que va desde El Metro a los Bomberos hay cinco grandes fallas de borde que están socavando esta ateria vial
“San Pedro podría quedar incomunicado tanto de Los Teques como de El Jarillo”, advirtió este jueves el concejal Roberto Rojas tras presentar los resultados de un recorrido realizado por todo el margen del río, desde la estacion Alí Primera hasta la referida población.
“Pudimos constatar la existencia de al menos 14 inmensas fallas de borde que amenazan con colapsar el río, incomunicar a Los Teques con esa parroquia y con El Jarillo y causar graves daños materiales a algunas viviendas y negocios que están asentados en la rivera”, dijo el edil tras señalar que los agricultores de la zona se verían igualmente afectados al no poder transportar sus cosechas o tener que tomar una ruta más larga para vender.
Rojas recordó que el dragado preventivo y el oportuno mantenimiento del principal afluente de la capital mirandina es competencia del Ministerio del Ambiente y de la Alcaldía de Guaicaipuro, “pero no lo hicieron a tiempo y por eso los efectos de la lluvia han causado estragos en el cauce del rio y en la carretera que lo bordea hasta el pueblo de San Pedro”, dijo.
-Es la primera vez en muchos años que vivimos una situación similar porque se sabe que este río es de alta vulnerabilidad ya que la corriente de sus aguas es fuerte y cruza por varios sectores con alta población del municipio; sin embargo, han dejado de atender esta problemática y ya el daño está avanzado.
Aseguró que la situación es de extrema gravedad porque sólo en el tramo de la avenida Víctor Baptista que va desde El Metro a los Bomberos hay cinco grandes fallas de borde que están socavando esta ateria vial, que por ser urbana es competencia exclusiva de la alcaldía; de allí hasta San Pedro hay otras cuatro más y cinco hasta el sector Río Arriba que es de responsabilidad del gobierno nacional según la Gaceta Oficial 39.200 de 2.009 que le arrebató esa función a la Gobernación de Miranda.“Exhortamos a ambas instituciones a atender esta problemática antes de que sea la crónica de una muerte anunciada”, puntualizó Rojas.
Daniel Murolo
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Los tres contenedores requisados estaban destinados a una empresa de San Pedro Sula, segunda ciudad de Honduras, situada a 240 km al norte de la capital