La banda tributo Beatlemania Now volvió a hacer sonar la música del mítico cuarteto de Liverpool en Washington, al cumplirse medio siglo de su primer concierto en Estados Unidos.
Unas 3.000 personas asistieron al concierto conmemorativo en el Uline Arena, un antiguo pabellón deportivo de la capital estadounidense reconvertido ahora en aparcamiento y conocido en su día como Washington Coliseum, donde hace 50 años John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr debutaron en América.
Todo estaba pensado para recrear las andanzas de los Beatles aquel 11 de febrero de 1964: además del escenario, repitió el telonero de entonces, Tommy Roe y también la banda tributo tocó las canciones en idéntico orden y empezando a la misma hora que hace medio siglo.
Incluso el frío, presente hace 50 años -cuando había más de 20 centímetros de nieve-, se apuntó a la velada y compartió protagonismo con la música.
Tampoco faltaron ni los flequillos ni los trajes grises característicos de los Beatles con los que se atavió el cuarteto de tributo para que el mimetismo fuera total.
Fue una noche para la nostalgia también, para unos porque reeditaron las vivencias de hace cinco décadas y para otros porque fantasearon con haber estado allí y, de hecho, aplaudieron, cantaron y bailaron como si los imitadores fueran los originales.
Los organizadores colgaron el cartel de «no hay entradas» para este concierto conmemorativo, aunque la asistencia fue menor que hace medio siglo, cuando más de 8.000 personas vibraron con la música de los británicos, la mayor multitud ante la que tocaron nunca.
Los Beatles emprendieron su primera gira americana avalados por la buena acogida de su música, pero sus primeros pasos en el país norteamericano catapultaron su fama y Estados Unidos inició entonces un idilio con la banda que sigue vivo 50 años después.
AP