Como habíamos anunciado, los partidos miembros de la Mesa de la Unidad Democrática nos hacemos presentes en la concentración convocada en solidaridad con Leopoldo López, quien es objeto de acusaciones sin base y de una orden de captura injusta. Nuestro compañero, ha declarado públicamente su decisión personal de dar la cara y para eso invitó al pueblo a acompañarlo en una jornada pacífica que exponga masivamente el rechazo a la injusticia y la vocación de paz de los venezolanos.
Con un provocador despliegue policial y militar el Gobierno pretende impedir a los ciudadanos su derecho a reunirse en paz, poniendo de manifiesto la discriminación odiosa de que unos sí tiene derecho a expresarse en la calle cuando sean convocados, y otros lo tenemos prohibido. Son esas conductas las que promueven la confrontación y la violencia. Condenamos sin reservas el abuso arrogante y desviado que el Gobierno hace de su poder. Ha dicho el propio Leopoldo López ayer lo que siempre ha sostenido la Unidad como política. Nuestro camino es la paz, no debemos poner en riesgo la vida de ningún venezolano. Nuestra patria, nuestras familias, nos necesitan a todos vivos para luchar por ella. Expresemos en paz, cívicamente, venezolanamente, nuestra protesta profunda y nuestra voluntad de cambio. Hoy, la mayor valentía es la sensatez. No caigamos en la trampa provocadora del Gobierno. Es nuestro mensaje a los compatriotas que han atendido, este día, el llamado de nuestro compañero.
El Gobierno debe afrontar la realidad, escuchar la voz del pueblo y hablar claro al país. No son los jóvenes que protestan un peligro para el Estado. Con la autoridad moral de quienes han condenado claramente la violencia, afirmamos que son la delincuencia impune y los “colectivos” paramilitares armados, la escasez, los precios altos, los que amenazan la paz de la República.
Prohibir las protestas solo trae más protestas, y expresiones extremas de la frustración y la amargura con peligros que hemos advertido. Lo que hay que hacer es garantizar el derecho a la protesta pacífica, escuchar y comprender los graves motivos para la profunda inconformidad, y ofrecer cauces cívicos para que todos los venezolanos puedan expresarse, gracias a la libertad de expresión, al derecho a la información y al derecho constitucional a la protesta pacífica y desarmada que hoy se nos niegan.
En el alto Gobierno saben que han estado equivocados y tienen que atreverse a rectificar. El reciente cambio en la dirección del SEBIN es una evidencia de esa realidad que debe ser admitida. Lo mismo que la presentación y el procesamiento de los verdaderos responsables de las víctimas fatales del 12 de febrero.
Entender esas verdades de la Venezuela de hoy, es la responsabilidad del Gobierno. La nuestra es ofrecer a todos los venezolanos, una ruta de cambio democrático en paz, en unidad. En los próximos días anunciaremos una agenda de lucha cívica unitaria, para que cada venezolano de cada sector social y cada región, sienta nuestra compañía y nuestra solidaridad.
Venezuela somos todos. Lo dijimos en nuestra campaña electoral y lo reiteramos hoy. No permitamos que la división y el odio manchen de sangre la bandera tricolor que nos une. Salgamos todos, a conciencia de nuestras diferencias, a enfrentar y superar los graves problemas que vive la Nación.
Caracas, 18 de febrero de 2014
Mesa de la Unidad Democrática
