
Comunicadio de la Junta Directiva Nacional del Círculo de Reporteros Gráficos de Venezuela (CRGV)
Los Reporteros Gráficos de Venezuela exigimos al Estado, a los conciudadanos del país, respeten y protejan nuestra labor en garantía de la libertad e independencia profesional como una de las condiciones para cumplir con el deber ético de informar de manera veraz.
Al Gobierno Nacional le reclamamos respete y haga respetar la Constitución y demás leyes de la República a las que como personas tenemos derechos todos los ciudadanos que en el país vivimos.
Como trabajadores de la prensa nos vemos afectados hoy por el conflicto que trajo la inseguridad, el desabastecimiento y otros males económicos, sociales y políticos que desencadenaron en las protestas urbanas que han dejado un saldo de 17 muertes, centenares de heridos por ataques e incontables presos entre las que nos contamos.
Llamamos la atención del Ejecutivo Nacional y autoridades de seguridad de Estado que como rectores de la vida ciudadana en el país, así como la de nuestros coterráneos, para evitar sea silenciada nuestra labor de informadores, a todas luces, para tratar de limitar e impedirle a nuestros compatriotas su derecho cardinal a estar informados.
Como dejó sentado el francés, Albert Camus, premio nobel de literatura 1957 y disidente comunista: “Una prensa libre puede ser buena o mala, pero sin libertad… no será otra cosa” que “mala”.
Nuestra responsabilidad
El compromiso que como Reporteros Gráficos contrajimos con el medio público o privado para el que trabajamos y a la sociedad, a la que nos debemos, tiene base en la responsabilidad que sentimos cada día al salir con nuestras cámaras a realizar nuestro trabajo que se fundamenta en la veracidad.
Recomendamos a nuestros colegas
La Junta Directiva del Círculo de Reporteros Gráficos de Venezuela (CRGV) recomienda a sus afiliados que cubren en el lugar de los hechos como prioritaria su supervivencia e integridad física, la misma dependerá de cómo actuemos en los escenarios de alto riesgo con situaciones violentas por lo que debe analizar rápidamente y de forma instintiva el riesgo que corren en la zona. Valoren su seguridad y procuren elegir un lugar seguro desde donde se pueda observar y hacer el trabajo.
Entre las medidas de seguridad, aparte de los carros blindados, nos ayudarán el chaleco antibalas, el casco, y confiar en el consejo de los lugareños para hacer nuestro trabajo.
¡Recordemos! Los periodistas somos un claro objetivo para diversos grupos violentos, armados o no, por el simple hecho de ser periodista, lo que nos convierte de inmediato en blanco de funcionarios de cuerpos de seguridad del Estado y paramilitares.
Al Estado y a las autoridades que lo conforman le recordamos que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas dictó la resolución 1738 para la protección a periodistas, pero los crímenes contra los periodistas que lejos de disminuir, siguen incrementándose año a año.
Eso nos da una idea de que las amenazas para la libertad de información, siguen muy presentes en nuestros días. Venezuela no es la excepción.
El objetivo de la resolución es “obrar en favor del establecimiento de un entorno libre y seguro para los periodistas y los trabajadores de los medios de comunicación, tanto en situaciones de conflicto como en otras, a fin de fortalecer la paz, la democracia y el desarrollo en todo el mundo”. Las amenazas a la vida, a la integridad física o a la libertad del reportero gráfico, no son los únicos retos a los que debemos enfrentarnos en la actualidad.