El expresidente peruano Alberto Fujimori, que cumple una condena de 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad, quedó internado este viernes en una clínica de Lima, por una lesión en el brazo izquierdo producto de un «pequeño infarto cerebral».
«La pérdida de fuerza (en el brazo) es producto de un infarto cerebral» que de no ser atendido puede dejarlo hemipléjico o en silla de ruedas, detalló el neurólogo Juan Francisco Barreto.
El expresidente de 75 años había sido trasladado a esa clínica en la mañana desde la prisión, solo para someterse a una resonancia magnética por la lesión en el brazo, pero los médicos que le atendieron determinaron que debe quedarse internado.
El neurólogo añadió que «su situación es moderadamente grave» y que se le van a practicar diversos estudios neurovasculares.
El tiempo que se va a «quedar internado depende de cómo evolucione», añadió.
Horas antes, en declaraciones a Canal N, el médico Alejandro Aguinaga había señalado que Fujimori presentó el domingo pasado «pérdida de fuerza en el brazo izquierdo», por lo que se le pidió a un neurólogo que lo evaluará.
«La primera impresión fue que era un espasmo transitorio porque fue recuperando la fuerza, pero la sensibilidad fina sigue comprometida», afirmó Aguinaga.
Para tener una precisión diagnóstica el neurólogo recomendó realizar una resonancia magnética al expresidente, según Aguinaga.
Agencias