
Los habitantes de la urbanización Cecilio Acosta de la comunidad tequeña El Paso deben atravesar “un campo minado” para poder acceder diariamente a sus hogares, debido a que grandes troneras dificultan significativamente el tránsito vehicular por dicha zona.
Según informan algunos vecinos la vialidad del urbanismo no ha sido reparada desde hace más de tres años, por lo que hacen un llamado al alcalde Francisco Garcés para que se avoque a sus funciones y repavimente las calles y avenidas de la ciudad capital.
“Hay demasiados huecos en el camino para poder llegar hasta aquí. El sector Mal Paso y la Cecilio Acosta están completamente olvidados por los entes municipales, no le hacen un cariñito a la carretera desde hace muchos años”, manifestó Ericka Fernández.
Las aceras de la localidad son otro de los problemas que deben enfrentar los peatones, ya que las mismas se observan desgastadas y en muchos de los tramos los deslizamientos de tierra y raíces de los árboles han destruido casi por completo las caminerías, obligando a los transeúntes a circular por la vía corriendo el riesgo de ser arrollados por los conductores.
“Pedimos que nos acomoden las aceras, nuestros niños deben caminar por la calle simplemente porque aquí no hay dolientes que se preocupen del bienestar de los tequeños”, dijo Fernández.
Montículos de basura
La falta de recolección de desechos sólidos por parte del camión del aseo urbano de la Alcaldía ocasiona la formación de enormes montículos de basura que a su vez obstruyen gran parte de las áreas comunes del Bloque I de la urbanización Cecilio Acosta.
“El Mercal que tenemos adyacente produce mucha basura, la cual nos la apuestan en la entrada del bloque y que gracias a la tardanza del camión del aseo los gusanos y las moscas nos invaden día y noche. El camión a veces tarda hasta más de una semana en pasar por acá. Los demás bloques tienen la misma problemática, es más todo el municipio está igual”, declaró Patricia Carreño.
Algunos habitantes de la comunidad aseveran que muchas veces el camión del aseo pasa por la zona, pero no hace la recolección en todos los bloques, por lo que en algunos la situación se encuentra peor y piden un mejor servicio de aseo para así evitar la propagación de enfermedades estomacales, respiratorias y tópicas.
A oscuras
El camino que deben transitar los habitantes del Bloque I para acceder a sus instalaciones se encuentra actualmente en penumbras, debido a que algunos de los bombillos de los postes eléctricos del lugar están quemados desde hace varios meses y pese a los reiterados llamados que han hecho los vecinos aún siguen a la espera de las reparaciones pertinentes.
“Los bombillos sirven cada vez que les provoca, hay noches en que prenden y otras en que no. Esto a traído como consecuencia que algunas personas ajenas a la urbanización se instalen en algunas de las áreas de los estacionamientos con música a todo volumen y a consumir bebidas y sustancias estupefacientes”, dijo Carreño.
Caminería “en jaque”
El Bloque I cuenta con un acceso que utilizan los peatones para “recortar camino”, pero que desde hace algunos meses atrás no han podido utilizar por la gran cantidad de maleza que lo obstaculiza.
“Ese camino está tapado completamente por el monte y eso que hemos avisado a la Alcaldía para que mande sus cuadrillas de limpieza y nada. Algunos pasan igual, pero particularmente a mi me da miedo porque hasta una culebra le puede salir a uno por allí y hasta te pueden robar fácilmente”, indicó Carreño.
Inseguridad latente
La falta de patrullaje por esta zona tequeña ha causado que casi diariamente los vecinos sean víctimas de robos a mano arma y de hurtos en los estacionamientos de los diferentes bloques que conforman la urbanización, motivo por el cual “claman” porque el patrullaje inteligente “se haga sentir” en El Paso.
“Casi todas las semanas uno se entera que robaron a alguien mientras iba camino a su casa. Es impresionante como teniendo al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) aquí mismo esto se haya vuelto tan peligroso. Las patrullas pasa claro está, pero no hacen su trabajo”, fue lo que manifestó Carreño al referirse al alto índice de delincuencia que mantiene en vilo a los que hacen vida en la localidad.
Ronald Gil- [email protected] / @thedaniels21