
Carlos Javier Arencibia, secretario general de Bandera Roja Carrizal, declaró que el partido se mantendrá en las calles pacíficamente y en un rol de vanguardia a pesar de que varios dirigentes hayan recibido amenazas de muerte.
“Hay gente, como el candidato perdedor de Carrizal o el alcalde de Guaicaipuro, que por no salir de sus oficinas con aire acondicionado o, en el caso de Garcés, no ser de los Altos Mirandinos, desconocen el respeto mutuo que tenemos en el partido con el pueblo oficialista, quienes saben que nuestro enemigo es el Gobierno y no la gente que temporalmente lo respalda. Así que mejor dejen de amenazarnos y buscar enfrentar pueblo contra pueblo, nosotros seguiremos en las calles dirigiendo está rebelión democrática y pacífica que se plantea sacar el país de esta ruina”, expresó.
Por su parte, Fabricio Briceño, secretario nacional adjunto de la Unión de Jóvenes Revolucionarios- Juventud Bandera Roja, instó a Farith Fraija a “ser igual de valiente como lo es para enviar emisarios a amenazar cuadros políticos, o como lo es cuando ataca a jóvenes trabajadores desde su programa de radio, para que lo sea enfrentando a una empresa transnacional como Odebretch que despidió 80 obreros del Metro Los Teques recientemente, siendo vicepresidente del subterráneo”.
A su juicio, Fraija se hace llamar obrerista pero representa los intereses del capitalismo y del fascismo en Venezuela al omitir acciones como la emprendida por la transnacional brasileña y defender reiteradamente a las fuerzas de represión del Estado en el ataque desmedido contra jóvenes manifestantes.
Sobre las amenazas, recalcó que se tienen precisadas varias personas que estarían implicadas en hechos violentos en su contra. Entre ellas, un funcionario retirado de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGIM).
Ricardo Pérez, jefe de la Unión de Trabajadores Revolucionarios de los Altos Mirandinos, hizo un llamado a la población para que siga incorporándose a las manifestaciones pacíficas convocadas por los sectores democráticos de la subregión, y a tomar permanentemente como símbolo de lucha y espacio para el debate político las Plazas de la Resistencia.
Además, exhortó a la sociedad civil la organización de asambleas populares en cada edificio, universidad, lugar de trabajo “y en sí en cualquiera que sea su espacio natural de desenvolvimiento, lo importante es discutir la situación actual del país y definir acciones para expresarse”, concluyó. /NP