La cantante se somete a terapias alternativas para que su cerebro rechace una posible vuelta con el músico.
La artista estadounidense Katy Perry quedó destrozada cuando sus dos años de amor con el cantante John Mayer llegaron a un punto y final el mes de febrero pasado tras dispararse los rumores de que el músico le había sido infiel.
Sin embargo, Katy, lejos de dejarse llevar por la desesperación, trata de hacer cuanto puede para superar el mal momento.
«Katy se quedó hundida cuando rompieron. Habían hablado de matrimonio y ella creía que él había cambiado. Pero Katy cree en el poder de las terapias alternativas por lo que quiere, a través de la hipnoterapia, olvidarse de él para siempre. Quiere que su cerebro no acepte la vuelta de John. Quiere dejar de considerarlo atractivo», contó una fuente a la edición británica de la revista Grazia.
La popular cantante -quien estuvo anteriormente casada con Russell Brand- ya había experimentado dos rupturas previas, pero esta vez está decidida a no retomar su historia con él.
«John hizo mucho daño a Katy, y ella ya no quiere que vuelva. Él detesta que las mujeres le dejen, pero esta vez está decidida a borrarle de su vida. Lo primero que hizo fue decirle que sacara todas sus cosas de su casa. Katy necesita un nuevo arranque y camina decidida por el sendero que dejará atrás su relación con John», añadió.
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