
Habitantes, comerciantes y agricultores observan con suma preocupación la cercanía de la época de lluvia y la falta de limpieza del cauce del río San Pedro, el cual anualmente se desborda causando numerosos destrozos en los diferentes sectores de la parroquia guaicaipureña.
“Hasta la fecha no han limpiado absolutamente nada, es indudable que en el primer palo de agua ese río se va a volver a salir. La semana pasada cayó una lloviznita y se desbordó. No ha venido nadie, pero cuando están los destrozos viene todo el mundo a querer ayudar, pero no terminan de resolvernos”, manifestó María Serafín, vecina del lugar.
Desde hace un año las cuadrillas de la Corporación de Desarrollo de la Cuenca del Río Tuy (Corpomiranda), a cargo de Elías Jaua, no se presentan en la zona para realizar el debido mantenimiento preventivo y el retiro de sedimentos acordado luego de las inspecciones realizadas en mayo del año pasado por miembros de la Alcaldía de Guaicaipuro, Dirección Estadal Ambiental en Miranda (DEA) y poder popular, según dan fe algunos residentes de la comunidad.
“Lo único que pedimos los que vivimos aquí es que nos embaulen el río, eso es todo”, dijo Serafín.
En un recorrido hecho por el equipo reporteril del diario La Región se pudo constatar que algunos tramos de las caminerías están sumamente deteriorados por las reiteradas crecidas del río, hay también gran cantidad de maleza y escombros que obstruyen el cauce del río y ciertos derrumbes y fallas de borde que tienen meses poniendo en vilo la carretera principal de la localidad.
Numerosos afectados
Esta problemática, la cual tiene varios años afectando a los sampedreños, no sólo mantiene en jaque a más de 800 viviendas construidas a las márgenes del río, sino a los comercios que se ubican en diferentes puntos de la vía.
Colegios, plazas, puentes, cementerio, una casa hogar y el terminal son otras de las infraestructuras que “sufren” severos daños al desbordarse el río, lo cual ocurre en diferentes sectores de la zona poblada.
“Perdemos mucha mercancía, ya hasta tenemos planes de contingencia de las tantas veces que hemos tenido que vivir esa situación. Los consejos comunales vamos hasta la alcaldía y nos prometen cosas que nunca cumplen”, aseveró Serafín.
Por otra parte, algunos representantes de uno de los planteles ubicado en pleno corazón de San Pedro manifiestan que sus hijos han tenido que perder clases ciertos días debido a los desbordamientos que han tenido lugar en este tramo.
“El año pasado perdieron algunos días de actividades pese a que el agua no llegó hasta el plantel, pero igual se ven afectados porque el camino se obstaculiza y el transporte no puede llegar hasta la comunidad”, indicó Carmen Ascanio.
Brote de enfermedades
Además de inundar viviendas, carreteras y demás estructuras de la zona, el desbordamiento del río trae consigo algunas enfermedades de las cuales son víctimas niños, jóvenes y adultos mayores.
“Tenemos una señora mayor que es diabética, en uno de los tantos desbordamientos se le infectó un dedo que le tuvieron que amputar. Hemos pedido ayuda para ella y nada”, afirmó Serafín.
Igualmente, el polvillo que se origina luego de que el pantano se seca por la acción del sol y el viento, produce enfermedades respiratorias, estomacales y tópicas.
Proyecto fallido
El pasado dos de mayo de 2013 el presidente Nicolás Maduro, durante su Gobierno de Calle, aprobó recursos por Bs. 29 millones y 1.4 millones de dólares para la canalización del río San Pedro, proyecto que fue presentado por Corpomiranda; los sampedreños aseguran que aún no han visto el primer movimiento de tierra.
“Ese dinero como todo en este país se lo robaron porque aquí no han hecho nada, solamente promesas que ellos mismos saben que no cumplirán”, indicó Pablo Márquez.
Por otra parte, durante los recorridos hechos por miembros de la Alcaldía de Guicaipuro durante los destrozos de mayo de 2013, se determinó que el río no podía ser embaulado, por lo que se aprobó en su lugar el saneamiento que estaría dividido en cuatro obras: instalación de colectores de cloacas en el mercado municipal El Paso, un sifón invertido para el paso y tratamiento del agua en el sector Mal Paso; además, estación de bombeo de aguas residuales en Ramo Verde y colectores de aguas servidas en el 23 de Enero y centro de la ciudad.
Ronald Gil- [email protected] / @thedaniels21