
“Desde hace más dos años no nos asfaltan la carretera”, manifestó Gerardo Manrique, habitante de la calle El Colegio de la populosa comunidad carrizaleña Barola, en la cual no cabe un hueco más, por lo que los vecinos piden a la Alcaldía a que tome cartas en el asunto antes que inicie la temporada de lluvias y la situación empeore.
Huecos de diferentes magnitudes dificultan el tránsito vehicular a los largo y ancho de toda la calle, situación que pone en riesgo a los conductores que deben esquivar las troneras para evitar caer en ellas.
“Muchos motorizados han ido a parar al piso al caer en los huecos, necesitamos que coloquen una nueva carpeta asfáltica, porque cuando empiece a llover los huecos se van hacer más grandes”, dijo Manrique.
Sumado ello, los usuarios de la línea de transporte que cubre dicha ruta afirman que las unidades tardan hasta más de 30 minutos en llegar al sector, por lo que deben movilizarse en mototaxi o taxis hasta el centro del pueblo.
“Tenemos que cazar al transporte, porque tarda mucho en llegar hasta las paradas más lejanas y esto es un problema, ya que la mayoría debe llegar a tiempo a sus trabajos y lugares de estudio”, declaró Luisa Álvarez.
Por su parte, las caminerías y aceras se ausentan por completo del lugar, por lo que los peatones se ven obligados a caminar por la carretera, corriendo el riesgo de ser arrollados por los vehículos.
Ronald Gil- [email protected] / @thedaniels21