No es ninguna novedad que en cualquier país tanto el gobierno como la oposición pasen por circunstancias difíciles en momentos determinados, pero para el politólogo Sergio Graffe es de suma preocupación si esas crisis suceden en un escenario complicado como el que atraviesa Venezuela debido a la problemática económica, social y política.
Advierte que la población podría entrar en “zozobra colectiva” si no existe un sólido liderazgo que canalice sus inquietudes y frustraciones; “y de allí a un conflicto social de calle, sólo hay un paso”.
El gobierno nacional está haciendo esfuerzos para que las medidas económicas que están programadas para los próximos días generen el menor impacto posible en el ánimo de la población; “pero sus efectos no se podrán evitar aunque se presenten de forma separada y en tiempos distintos, especialmente las relacionadas con el aumento de la gasolina y de las tarifas eléctricas y la de la unificación cambiaria que podría generar una inflación de tres dígitos para el final del año”, detalla Graffe.
-Ante el evidente vacío de liderazgo del gobierno y las graves fallas operativas de la oposición, se podría producir una situación similar a la del “caracazo” de 1.989, porque persisten las causas que lo generaron.
Asegura que la incapacidad del gobierno para manejar la actual situación económica y social no se puede analizar de forma separada a la crisis que padece la oposición, porque ambas atentan contra la estabilidad política necesaria para evitar que la población encuentre sus propios canales de expresión ante la imposibilidad de cubrir sus demandas de forma organizada; y lamentablemente se perdió la oportunidad de un diálogo nacional que pudiera conjurar esta amenaza.
Por su parte, si la oposición logra superar sus problemas operativos en el mediano plazo, al menos podría presentar un esquema alternativo frente al del gobierno y así servir de muro de contención ante una eventual salida de calle; “porque el momento no es para sacar cálculos electorales sino para cambiar el rumbo del país, de forma manejable; porque no se puede esperar a que la superación de la actual crisis económica pase por implementar medidas de alto impacto en un país devastado por la zozobra o las manifestaciones de calle, con las consecuencias de vidas humanas que ello supone”.
Asegura que el gobierno comete un error estratégico si considera que el apoyo de sus aliados políticos es suficiente para crear un escenario que pueda soportar el impacto de las medidas programadas, porque aunque es un elemento a su favor, no es garantía de que el resto de la población lo pueda respaldar; “recordemos que “el caracazo” comenzó en sitios puntuales y con pocos manifestantes, pero que se extendió a otras partes del país porque había condiciones objetivas para la protesta”.
Daniel Murolo – [email protected] / @dmurolo
