Con otro diciembre en puertas el Gobierno ha anunciado el Plan Navidades Felices para garantizar que todos los venezolanos puedan cumplir satisfactoriamente las tradiciones decembrinas, que van desde la preparación de hallacas hasta la compra de estrenos y juguetes para los consentidos del hogar.
La medida ha traído nuevas rebajas, así como un nuevo ajuste del salario mínimo por el orden del 15 % que se hará efectivo a partir del primero de diciembre. Sin embargo, las cuentas siguen sin cuadrarle a las amas de casa, quienes para no perder la costumbre acechan las diversas tiendas con la esperanza de encontrar lo que buscan y a los precios justos prometidos por las autoridades.
“Hace unos días se formó una alharaca por las fulanas rebajas en la juguetería General Import y después de una tremenda cola bajo un inclemente sol, descubrimos que apenas como 6 artículos fueron, apenas, rebajados, y las Barbie baratas prometidas no habían llegado, al menos en el caso de la sucursal de El Tambor en la capital mirandina”, declaró Gregoria Morales, residente de El Nacional.
–Con el tema de los electrodomésticos en los pocos lugares que quedan del ramo en Los Teques los precios son exorbitantes y por mi trabajo no tengo tiempo para ir a Caracas que es donde han colocado ferias (…) Tampoco me motivo mucho en ir porque he escuchado de boca de vecinos que las colas superan las ocho horas de espera y muchas veces cuando entras ya no hay lo que querías llevar.
Juguetes guindando
Pese a la transmisión en vivo de la aplicación de la Ley Orgánica de Precios Justos en una juguetería en Caracas, el único artículo que bajó significativamente su precio de venta al público fue la Barbie, que pasó de ser ofrecida en 2.999 bolívares a Bs. 553.
“Este año el Niño Jesús irá a venir cargado de puras muñecas de esa marca, porque es lo único que está medianamente accesible al bolsillo, porque si comparamos el sueldo mínimo y sacamos la cuenta de los gastos básicos y de paso le agregamos los gastos adicionales del último mes del año, los números no dan”, dijo Marcos Quijano, habitante de Carrizal.
–Yo tengo dos varones, así que básicamente no me funciona que estén baratas las Barbie. Pasé por la juguetería de El Tambor con la esperanza de hallar un par de carros a control remoto a buen precio, pero lo más barato que los he visto es en Bs. 2.500 cada uno.
Sin embargo, con el despliegue de los inspectores populares y las nuevas fiscalizaciones que se están realizando en diversos rincones del país, muchas personas están a la expectativa y están dejando para última hora la compra de juguetes.
“El año pasado las rebajas arrancaron en noviembre, este año están repitiendo el patrón, así que voy a esperar que llegue diciembre para comprar lo que me pidió mi niña que no es precisamente una Barbie, porque aunque es la muñeca más popular del mundo desde que tengo uso de razón, ella quiere es una Lalaloopsy, que en ferias socialistas se hallan por Bs. 1.900 pero en las jugueterías no bajan de Bs. 3.500”, reveló Alba Jiménez, habitante de Club de Campo que este viernes recorría locales durante su hora de almuerzo.
Nueva costumbre
A la preparación del tradicional y calórico plato navideño, la carta al Niño Jesús y el ritual del Espíritu de la Navidad el 21 de diciembre se le suma una nueva costumbre: hacer colas en las afueras de los supermercados y perfumerías.
“El movimiento está aguado porque aún muchas personas no han cobrado sus aguinaldos, pero el venezolano así tenga que hacer kilométricas colas mantiene sus tradiciones”, dijo Rafael Romero, vendedor de una juguetería en Carrizal.
–Nos guste o no ya las colas se han convertido en parte de nuestra cotidianidad, así que diciembre no va a ser la excepción. Cuando la gente cobre las cuatro lochas adicionales de diciembre van a salir a comprar lo que encuentren, porque ya en este país ni ahorrar es rentable debido a las constante devaluaciones ni se puede dejar para después las compras porque es arriesgarse a no ver nunca más ese producto por el tema de las importaciones.
Johana Rodríguez – [email protected]/@michellejrl
