Momentos de “terror” y “suspenso” fue lo que vivieron los habitantes de los bloques I y II de la urbanización Cecilio Acosta del sector El Paso en Los Teques, luego de que en horas de la tarde noche del pasado 31 de diciembre se presentara una situación irregular en el Centro de Reclusión de Poliguaicicaiuro, ubicado en el referido lugar.
Como recordaran durante el ultimo día del año familiares de los 49 privados de libertad tomaron el centro, en complicidad con los reclusos, como medida de protesta ante la negativa de los funcionarios policiales de permitir el ingreso de bebidas alcohólicas al recinto, así como de extender el horario de visitas que ya había sido prorrogado una hora y media previamente.
La situación se salió de control una vez que los reos intentaron someter a un efectivo, lo cual dio paso según lo expuesto por los propios vecinos a una verdadera batalla campal.
José Rodríguez, narró que durante la trifulca que se presentó en el centro de reclusión, se vio visiblemente afectado, pues por ser comerciante tuvo que bajar la Santamaría de su local, por temor a que lo saquearan.
Contó que desde tempranas horas la situación que se evidenciaba en el lugar era de tensión total, ya que se escuchaban gritos de personas y el descontento de los familiares.
“Es primera vez que veo algo así, anteriormente si se habían presentado conatos de fugas pero eran controlados sin ningún tipo de eventualidades, pero esta vez no fue así (…) quienes vivimos aquí sabemos que esta zona es bastante tranquila, por eso es inaceptable que sean los propios organismos de seguridad los que colaboren con el caos, lo más pertinente es que se lleven ese centro de reclusión de aquí, porque esto es una zona residencial, vivimos muchas personas y esta en juego nuestra seguridad e integridad”, agregó el afectado.
Asimismo, la vecina Michelle Canino, destacó que pasaron un año nuevo atípico, debido al miedo que quedó impreso en cada uno de los vecinos del lugar. Explicó que la situación se generó a partir de la 1:30 de la tarde, siendo las 8:30 de la noche cuando se puso más tensa, debido a la gran cantidad de detonaciones que se percutieron.
“Nuestro año nuevo fue completamente diferente, no pudimos salir como otros años a compartir con los vecinos y dejar que nuestros niños jugaran, sinceramente nos oscurecieron nuestras celebraciones (…) ya es la tercera vez que se presenta una situación como esta, el llamado es a las autoridades para que reubiquen esa sede policial porque no están garantizando la seguridad de ninguno de nosotros, estamos en peligro, porque cada vez que alguien intenta escapar, los que corremos con más riesgo somos nosotros pues estamos a merced de que cualquier bala perdida nos toque”, sentenció.
Aunque la situación no paso a mayores, los vecinos de la urbanización Cecilio Acosta convocaron a una reunión general en donde discutirán diversos puntos como el traslado del centro de reclusión. Asimismo mostraron su descontento con la manera en que funciona la delegación, pues en principio se pensó que funcionaria como policía preventiva y terminó convirtiéndose en retén, poniendo a decenas de familias en peligro.
Ronald Padrón
