
Cada día se hace más extensa la lista de artículos que brillan por su ausencia en los anaqueles, realidad que viven las amas de casa y es estudiada por el Centro de Documentación y Análisis Social (Cendas), según el cual, durante el mes de diciembre escasearon 16 productos y 9 experimentaron un alza significativa en su precio.
Leche en polvo, sardinas enlatadas a precio regulado, pollo, carne de res a precio regulado, margarina, azúcar, pernil, aceite de maíz, queso blanco duro Santa Bárbara, arroz, harina de trigo, pastas alimenticias a precio regulado, harina de maíz, café, mayonesa y queso amarillo ( 27,6% de los 58 productos que contiene la canasta) fueron los grandes ausentes en Navidad.
Sin embargo esos son sólo productos del rubro alimenticio, ya que los compradores también realizaron caminatas diarias en busca de jabón de baño, detergente, lavaplatos, cera para pisos, compotas, Nenerina, toallines, toallitas, papel de baño, servilletas, leche condesada, leche líquida de un litro, cloro, pañales, suavizante, desodorante, afeitadora desechable, crema dental, champú, toallas sanitarias, jabón Las Llaves e insecticidas.
“Yo creo que el repunte excesivo de Chikungunya durante el 2014 fue por la carencia de repelentes; tuvimos que volver a las recetas de la abuela y mezclar alcohol con clavitos de olor para mantener a raya a los zancudos”, reflexionó Mérida Noruega, quien salió decepcionada este lunes de la Central Madeirense del C.C. La Hoyada en la capital mirandina al ver que no habían surtido con mercancía de su interés.
–Es impresionante cómo nos hemos acostumbrado a las colas. Cuando vi que no había fila en las afueras me decepcioné porque sabía que la ausencia de compradores era reflejo de anaqueles vacíos (…) Tenía semanas sin poder ingresar al mercado sin esperar al menos dos horas; al menos pude llevarme unas galletas para la merienda de los chamos así como unas frutitas para hacerles jugo, eso sí, sin azúcar porque no hay.
Alza constante
Otro problema con el que deben lidiar los compradores es con la inflación. Según Cendas, en diciembre de 2014 la CAF se ubicó en 17.230,42 bolívares, aumentando Bs. 1.421,36, 9,0% con respecto al mes de noviembre de 2014 y 106,4% entre diciembre de 2013 y diciembre de 2014, haciendo necesarios al menos 3.5 salarios mínimos para poder adquirir la canasta.
Entre los rubros que subieron su costo el pasado mes, destacan carnes y sus preparados, 21,8; azúcar y sal, 16,2%; leche, quesos y huevos, 10,6%; granos, 8,0%; café, 7,8%; frutas y hortalizas, 5,8%; pescados y mariscos, 4,7%; cereales y productos derivados, 3,3% y grasas y aceites, 2,9%.
“Aparte de que todas las semanas los productos traen un numero nuevo, hay que lidiar con el hecho de que 90 % de la mercancía regulada no llega desde hace meses y hay que pagar lo poco que se consigue con sobreprecio de hasta 100 %”, denunció Gloria Marcano, residente de la calle Cecilio Acosta de Los Teques.
–Un pollo entero puede llegar a costar 400 bolívares, lo mismo que un kilo de carne. Un kilo de Harina Pan pese a que está regulado en menos de Bs. 13, lo he llegado a cancelar hasta en Bs. 100, todo por no tener tiempo de hacer las colas que se forman en las afueras de los supermercados cuando llega. Estamos en una situación crítica.
Las cuentas no cuadran
“Una familia conformada por 4 personas: dos niños y dos adultos con trabajo y devengando sueldo mínimo más cestatickets, no da un ingreso mayor a los 14 mil, lo cual no da ni para cubrir los gastos alimenticios básicos”, reflexiona Pablo Uzcátegui mientras merodeaba una perfumería en la avenida La Hoyada a ver qué podía llevar.
–Con estos ingresos y la inflación haciendo de las suyas todos los santos días, podemos concluir que al menos la mitad de la población, donde me incluyo, vivimos en pobreza extrema porque vivimos trabajando para comer, último que ahora implica hacer colas de no menos de 4 horas. Si el Gobierno no empieza a trabajar para invertir esta situación, vamos a terminar matándonos por comida.
Johana Rodríguez [email protected]/@michellejrl