*Han tenido que pasar nueve discos de estudio desde «Ricky Martin» (1991) para llegar a la honestidad que exhibe en «A quien quiera escuchar» (Sony Music), casi una novela sentimental en la que se narra el ciclo del amor a través de canciones que nacieron y que respiran en español
Un mes después de la publicación de «A quien quiera escuchar», Ricky Martin se ratifica en las impresiones que avanzó cuando preparaba este disco: «Es el mejor de mi vida», insiste, ante el que califica como «un álbum para músicos» y, sobre todo, el mayor ejercicio que ha hecho de exposición sentimental.
«Hay vulnerabilidad. No le tuve miedo a sentir y dejé fluir todo en el proceso creativo», cuenta el artista puertorriqueño durante una entrevista con Efe en Madrid, en la que se muestra relajado, conectado con esa noción de «espiritualidad» que aflora en los tatuajes de henna de sus manos y a la que apela como fuente de superación de sus conflictos internos.
Esos los empezó a dejar atrás hace años, cuando en 2010 publicó un mensaje en Twitter en el que reconoció su condición sexual. Solo un año después publicó «Música + alma + sexo», pero quizás era demasiado pronto para que aflorara musicalmente el nuevo momento en el que se encuentra.
«Estaba pasando por tanto que aún estaba conociéndome. Me liberé y me despojé de todos esos miedos y ya hoy pude profundizar y buscar dentro de mí lo que de verdad soy, lo que he vivido desde entonces», cuenta.
Han tenido que pasar nueve discos de estudio desde «Ricky Martin» (1991) para llegar a la honestidad que exhibe en «A quien quiera escuchar» (Sony Music), casi una novela sentimental en la que se narra el ciclo del amor a través de canciones que nacieron y que respiran en español.
«Es lo que necesito hoy en día», afirma Martin, que se pregunta si eso ha influido en un «nivel de sinceridad que traspasa incluso las barreras del idioma» y que ha llevado el álbum al número 1 en ventas en países de Oriente Medio.
Aunque arranque con «Adiós», un tema rítmico, optimista e irónico en el que fusiona los aires caribeños con arreglos balcánicos, la principal baza de este álbum se encuentra en la balada «Disparo al corazón», sobre el encuentro con una persona capaz de irrumpir en su vida rompiendo esquemas y desatando «una explosión de emociones».
«Es la canción de amor más bonita que se haya escrito en mucho tiempo», defiende Martin, que en su nuevo trabajo también incorpora una canción ardiente y pasional como «Cuánto me acuerdo de ti» a ritmo de tango argentino.
EFE