«Decenas de docentes adscritos a la Gobernación de Miranda que se encontraban protestando pacíficamente para exigirle a Capriles el pago de la deuda que se le mantiene al sector, así como también solicitando un aumento salarial justo, quedaron impactados al ver cómo usan a la Policía de Miranda para evitar que se lleve a cabo una manifestación y que los docentes se acercaran al gobernador, pero no para cumplir con su labor de trabajar en los cuadrantes y velar por la seguridad del pueblo guatireño».
Así lo expresó Thaís Oquendo, alcaldesa de Zamora, quien señaló que «es lamentable ver cómo el Gobernador continúa demostrando su incapacidad para gobernar, ya que no solo mantiene totalmente desprotegido al estado Miranda, sino que también da la espalda a los educadores, que son los formadores de conocimiento y de futuro».
–¿Cómo es posible que llevamos más de un año exigiéndole a Capriles que ponga a trabajar a su policía en Zamora y solo la vemos en el municipio cuando trata de impedir una movilización pacífica de maestros que reclaman sus derechos?.
La alcaldesa sostuvo que en seis años, la Gobernación no ha implementado un solo plan en materia de seguridad que haya contribuido a salvaguardar a la ciudadanía, pero sí están usando a los funcionarios para amedrentar al pueblo y resguardar la integridad del Gobernador.
«Mientras el Gobierno nacional se encuentra discutiendo para mejorar el contrato colectivo a los educadores, Capriles continúa haciendo caso omiso y olvidando sus atribuciones. Le hacemos un llamado para que trabaje y cumpla con su deber».
Zulay Contreras, directora de Educación de Zamora, instó al Gobernador a atender los reclamos justos por los que protestan los maestros, al tiempo que aseguró que cuentan con su apoyo irrestricto.
«Esperemos que se aboque a atender los problemas de los ciudadanos y dejen de utilizar a PoliMiranda como su policía personal».
Indicó que en vez de impedir el reclamo de derechos, Capriles debería ocuparse de mejorar la calidad educativa y mejorar la infraestructura de las instituciones educativas mirandinas./NDP
