Cuando algunos están por debajo de los Bs.6.000 y los docentes 5, ubicados en sueldo mínimo (6747,98), la canasta básica ya pasa los Bs.40.000
Como insostenible, califican la situación económica los docentes nacionales y estadales de todo el país y es que aún con el 50% decretado por el Presidente Maduro, los docentes con su sueldo no llegan ni a la cuarta parte del precio de la canasta básica en Venezuela que según un estudio de Cendas ya pasa los Bs.40.000 y sigue en ascenso.
Magia e ingenio es lo que les toca utilizar a los profesionales de la educación, como a cualquier venezolano en la actualidad y es que mientras los docentes estadales luchan por las reivindicaciones laborales de su sueldo, exigiendo que se les asigne el 50% de aumento y el pago de sus deudas, están conscientes que allí no termina el problema, pues ningún salario en Venezuela está acorde con el precio de la canasta básica. Según se conoció el docente que más cobra con el aumento del 50% no llega a los Bs.15.000, es decir ni a la mitad de la canasta básica.
Mariné González docente 5 nacional, especificó que en el país no existe un tabulador justo en ningunas de las profesiones “aquí todos los venezolanos, con o sin profesión, cobramos lo mismo el mínimo, al gremio docente lo tienen totalmente desasistido, decretaron un 50% de aumento para bajar la marea, pero que aún en algunas instituciones sigue sin hacerse efectivo, no es justo que un trabajador informal gané más que un docente, que se supone que debería ser una de las profesiones mejores asalariadas del país, pues formamos el futuro y todos los profesionales dependen de la educación”, precisó.
“No nos alcanza ni para la comida y tenemos que comprar la papelería de la escuela”
“Estoy en el turno de la mañana, llegó a la escuela atiendo a los niños, en la hora de recreo estamos pendiente de que llegó a algún supermercado, porque no nos alcanza para comprar regulado, mucho menos a precio de bachaquero, nos turnamos para hacer la cola, y nos toca estar sustituyendo un producto por otro, hace tiempo que no compro ropa, zapatos, lo poco que llega es para la comida, en oportunidades uno se queda hasta sin el pasaje y para completar, tenemos que colaborar con el material de oficina de la escuela, comprar las hojas blancas y todo lo necesario para realizar las actividades pedagógicas”, afirmó González.
Karla Tovar
