Con el fin de solventar el problema de suministro de agua en el país, el partido Un Nuevo Tiempo propone un plan de rescate de las hidrológicas que contempla: Evaluar y sincerar el esquema de racionamiento, mantenimiento de los acueductos, descentralizar las empresas hidrológicas del país, culminar los proyectos en construcción y modernización de los embalses, así como despolitizar y recuperar el profesionalismo y la despolitización de la gerencia.
El Vicepresidente del Concejo Municipal de Chacao y miembro de la Dirección Nacional de UNT, Diego Scharifker, manifestó en rueda de prensa que este plan es viable para ser aplicado a todas las hidrológicas del país y lograr la restitución progresiva a mediano y largo plazo del servicio de agua en todo el país. “Esta propuesta busca garantizar un servicio de agua a los venezolanos de primera calidad”.
Reconoció que nadie puede hacer llover, pero lo que si puede hacer la viceministra de Gestión Ecosocialista de Aguas y Presidenta de Hidroven, Siboney Tineo es invertir los recursos asignados para que estos se traduzcan en obras. “La Presidenta de Hidroven Siboney Tinedo le mintió a la Asamblea Nacional, cuando dijo que se habían invertido más de 9 mil millones de dólares en obras, cuando todos los venezolanos sabemos que la inmensa mayoría de esos proyectos no han sido concluidos. Como el caso del Complejo Tuy IV que comprende el embalse de Cuira. La gran realidad es que ese dinero no está en el país, estará en otra partes, puede ser que esté en alguna cuenta en el Banco de Andorra, es por eso que consideramos importante que la Asamblea Nacional siga investigando sobre esta materia”.
Considera el concejal Scharifker que la presidenta de Hidroven debe aclarar cuáles son los mecanismos, que supuestamente han puesto en práctica para atender la crisis de la falta de agua, porque el problema sigue y se agudiza. “Aquí no se han realizado las obras necesarias, los embalses para enfrentar la escasez de agua en el país, lo vemos en Tuy IV, en el Estado Carabobo, la red de tuberías submarinas en el Estado Nueva Esparta, en el proyecto Yacambú Quibor de Lara, en el Estado Zulia y en cada uno de los Estados vemos que la crisis es exactamente igual”.
Planteó la necesidad de un cambio de modelo y en ese sentido, Un Nuevo Tiempo le presenta una visión distinta al país, una manera diferente de gestionar los sistemas de agua de Venezuela y ofrecerle al país propuestas, no solo para atender la actual crisis en el suministro, sino empezar a construir las bases de lo que será la política en este sector para la Venezuela de los próximos 50 años.
“Esta es una propuesta que se fundamenta en el principio de la descentralización. Proponemos una ruta para rescatar las hidrológicas a nivel nacional a través de un esquema de 5 pasos que comprende acciones inmediatas para atender la crisis y un modelo de administración que nos permita contar con un servicio confiable para los próximos 30 o 50 años”.
Informó que el plan es para la recuperación y fortalecimiento de Hidrocapital, que consta de 5 puntos, es una propuesta concisa para el caso de Caracas y la zona Metropolitana, pero que este mismo modelo se puede aplicar para el resto de las hidrológicas del país.
“Primero sincerar y cumplir el plan de racionamiento, establecer un control ciudadano y de los gobiernos locales sobre ese plan de racionamiento. Aumentar la operatividad de Hidrocapital proveyéndole de equipamiento, tecnología y recursos para cumplir con los múltiples programas de mantenimiento. Descentralizar Hidrocapital y establecer una mancomunidad administrativa entre la Alcaldía Metropolitana y la Gobernación de Miranda. Como cuarto punto, Scharifker solicita “Culminar el proyecto Tuy IV e inyectarle los recursos necesarios para que se finalice esta obra; que se investigue y sean castigados con prisión los responsables de la malversación de los fondos que fueron destinados para esta obra, y de la que se desconoce su estatus a la fecha”.
Finalmente planteó la necesidad de rescatar la institucionalidad de Hidrocapital, que sean profesionales y técnicos reales los que estén dirigiendo la empresa. Así mismo se debe despolitizar su administración, al igual que el resto de los servicios públicos y cumplir con los mecanismos de ley para garantizar la calidad y el suministro constante del agua”.
“Hay que pensar en un proyecto país para los próximos 50 años, y justamente este mecanismo que proponemos en nombre del partido Un Nuevo Tiempo pretende garantizar un proyecto a largo plazo. Son los municipios y los Estados los que deben tener la responsabilidad de administrar el servicio de agua potable, no un burócrata de escritorio en Caracas”.
Prensa Un Nuevo Tiempo
