Al menos 51 personas murieron y otras 78 resultaron heridas en un doble atentado suicida perpetrado en un campo de desplazados en Dikwa, en el estado de Borno, en el noreste de Nigeria, informaron ayer medios locales.
Según las primeras informaciones, el atentado se produjo el martes por la mañana cuando dos terroristas suicidas se infiltraron en el campo mientras las autoridades distribuían el desayuno, aunque la noticia del ataque no se ha difundido hasta hoy por las malas comunicaciones de la zona.
Todavía no hay cifras oficiales, pero gente de la zona asegura que durante el entierro masivo que se celebró ayer al menos 51 cuerpos, la mayoría de mujeres y niños, fueron sepultados.
Aunque ninguna fuerza ha reivindicado el ataque, las sospechas recaen sobre el grupo terrorista Boko Haram, que en los últimos años ha matado a decenas de miles de personas en su intento de imponer la sharía o ley islámica en el noreste de Nigeria.
“La gente estaba haciendo cola para el desayuno, y una de las bombas explotó.
En el caos que siguió a la explosión, otra bomba fue detonada”, explicó a Channels Televisión Mustapha Ali, un testigo del atentado.