La ciudad turística de Pedernales, un popular balneario de la costa ecuatoriana, es hoy el epicentro de una tragedia tras el terremoto de 7,8 grados de magnitud en la escala de Richter que sacudió el sábado esa zona costera del oeste de Ecuador.
En la zona hay casas destruidas, gente atrapada y desaparecida entre los escombros, niños que gritan por sus familiares y adultos que lloran desconsolados y asolados porque vieron morir a algunos de los suyos aplastados por la caída de los edificios./ Foto agencias