Estados Unidos expresó este jueves su confianza en que las instituciones democráticas de Brasil son suficientemente «sólidas» para enfrentar la crisis en ese país, donde la presidenta Dilma Rousseff fue suspendida de su cargo.
El presidente Barack Obama «continúa teniendo confianza en la solidez de las instituciones democráticas de Brasil para enfrentar la crisis política», dijo el portavoz del gobierno, Josh Earnest.
«Pretendemos respetar las instituciones, tradiciones y procedimientos gubernamentales», añadió Earnest durante su acostumbrada rueda de prensa diaria.
Rousseff fue reemplazada este jueves en la presidencia por su vice Michel Temer luego de que el Senado decidiera someterla a un juicio político por 55 votos contra 22 en una maratónica sesión.
Las declaraciones de Earnest mantienen la posición de Washington durante los meses del proceso contra Rousseff, expresando apoyo a un fuerte aliado regional, sin mediar en los asuntos políticos internos.
El miércoles Earnest había afirmado que «Brasil está bajo inspección y presiones y Estados Unidos va a estar ahí para apoyar a nuestro amigo y socio mientras enfrentan estos importantes desafíos».