
“Hasta hace año y medio un kilo de yuca podía llevarse por 20 bolívares, haciéndola cada día más popular entre los compradores que buscaban evadir las colas para adquirir harina de maíz precocida, arroz y pasta. Esta demanda ha llevado a que el producto ya se cotice casi en mil bolívares”, confesó Sandra Morales, vendedora del mercado de la avenida Francisco de Miranda.
–Nosotros aquí hacemos todo lo posible para brindarle las mejores ofertas a nuestros clientes, pero la verdad es que nadie se salva de la inflación galopante (…) Los productores deben lidiar con la escasez de fertilizantes y cuando los encuentran deben bajarse de la mula como Dios manda.
La situación es percibida por las amas de casa que se la pasan de cacería para rendir lo más posible el presupuesto. “La yuca se está poniendo carita, así que la alterno con la papa que ya está igual en Bs. 800. Antes me llevaba un kilito de casa cosa, ahora si acaso medio kilo y si veo que se me hace muy cuesta arriba llevo un cuarto y lo rindo como sea”, confesó Marlene Mendoza, compradora.
–La mejor manera de no golpear tanto el bolsillo es recorriendo las ferias campesinas y cuanto mercadito popular instalen. Yo soy muy leal al de la Arvelo porque ofrecen los precios más solidarios; sin embargo, como solo lo instalan los domingos, me toca recorrer otros lugares cuando me queda pelada la despensa antes de lo previsto.
Johana Rodrí[email protected]/@michellejrl