
Un sacerdote y una diputada iniciaron, por separado, una caminata de más de 500 kilómetros desde sus poblaciones de origen, ubicadas ambas al noreste del país, hasta la capital Caracas con el propósito de llamar la atención del mundo sobre la crisis humanitaria que vive Venezuela y participar en la manifestación del próximo primero de septiembre, reporta La Media News.
El cura venezolano es Lenin Ramón Bastidas Villegas, salió este lunes 22 de agosto desde el sur del estado Anzoátegui hasta la capital, con el propósito de inspirar a otros católicos a “dejar la indiferencia” ante la dramática situación que atraviesa Venezuela.
Preocupado por la falta de reconocimiento del gobierno de la crisis humanitaria actual, pide a la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), convoque una vigilia de ayuno y oración permanente frente a las instalaciones del Consejo Nacional Electoral (CNE), para conseguir una salida democrática bien por medio del revocatorio u otro mecanismo constitucional.
Para emprender este camino que hará en su mayoría a pie (549 kilómetros), renunció al cargo de párroco del municipio Independencia, el 15 agosto, durante la celebración de la misa por el Día de Nuestra Señora de Soledad.
“Tomé la decisión de renunciar a la parroquia para comenzar una lucha nacional por la paz. Esto no significa que yo haya renunciado a mi sacerdocio. Quiero demostrarle al pueblo que Cristo está preocupado por la situación del país, ver la miseria en tantos rostros, ver tanta corrupción. Esto se genera del odio y el rencor que se ha venido instaurando en Venezuela y más que Venezuela, en el corazón de los venezolanos, que no somos violentos y ahora vemos a tantos violentos”, explicó a los periodistas en la Plaza Bolívar de la población de El Tigre.
Asegura que su intención precisa, clara e irrevocable: “Que la CEV convoque a los obispos para que dejen de sacar comunicados y empiecen a acompañar al pueblo, que nosotros le llamamos rebaño. Es un pueblo que tiene pastores pero vive a merced de lobos, llámese a los políticos corruptos de la 4ta y de la 5ta”.
Quien se considera sacerdote legítimo de la Iglesia de Cristo, siente la obligación de preocuparse por el rebaño. “He visto cómo llegan niños desnutridos, padres pidiendo aunque sea un poquito de arroz”.
El Padre Lenin Ramón Bastidas Villegas, expresó que está dispuesto a morir hasta que haya una salida humanitaria y democrática a la situación que vive el país. “Si no hacemos esfuerzos, Venezuela estará llena de pobres hombres y mujeres que aceptan la corrupción”.
A pesar de haber tenido problemas con la glicemia y falta de entrenamiento físico, confía en poder inspirar a los jóvenes. “Parece que los jóvenes están de vacaciones mientras el país se cae. Están distraídos en una tableta. Quiero inspirarlos, pedirle a los obispos a que convoquen una vigilia de ayuno y oración permanente frente a las instalaciones del CNE, para que esto tenga una salida democrática”.
Criticó aquellos sectores del gobierno que invocan al Señor, “Cristo es libertad. No podemos seguir diciendo que somos cristianos, siendo indiferentes”.
Reiteró que la única manera de retirarlo de la carretera, es la convocatoria a la vigilia para que se reconozca la crisis humanitaria que padece el país.
El párroco se dejará ayudar por “colas” en los trayectos del camino Anzoátegui – Distrito Capital que no esté poblado.
Por su parte la diputada María Gabriela Hernández, inició una caminata pueblo a pueblo desde el estado Monagas hasta el Distrito Capital, unos 559 kilómetros de distancia. La iniciativa tiene como objetivo “transformar la indignación en acción”, mediante un recorrido que asegura sumará millones de venezolanos de cara a la Toma de Caracas que se realizará el 1 de septiembre.
Hernández indicó que esta actividad servirá de “inspiración y motivación” para todas las personas que sean alcanzadas durante su recorrido. “El fin es tocar a cada persona durante el recorrido, hacerme solidaria con esas familias venezolanas pero procurando esperanzar para que ese dolor, esa indignación la podamos transformar en acción; y como país, como una sola familia venezolana generar el cambio político en Venezuela lo antes posible, y nosotros encaminar el país hacia otro escenario de paz, bienestar y progreso para todos”, expresó.
Para la parlamentaria venezolana la necesidad del cambio del sistema de régimen es imperativa porque cada minuto que pasa son vidas y talentos humanos que se pierden en manos “de un régimen criminal y oprobioso”.
Hizo un llamado a los venezolanos que se trasladarán en carros particulares, buses o caminando. “Debemos elevar oraciones por Venezuela y por todos los que vamos a manifestar en esta Toma de Caracas, porque asistiremos por el llamado al reclamo de nuestros derechos políticos, nuestros derechos de vida y la posibilidad de que todos los venezolanos podamos transitar caminos de paz”.
La “Caminata hasta Caracas” empezó el martes 30 de agosto en Maturín, capital del referido estado, desde la redoma Juana La Avanzadora, donde Hernández junto a otras figuras políticas del estado recorrieron el territorio. La caminata fue retomada este miércoles a las 05:30 am (hora Venezuela) desde las calles de Píritu y marcharán “pueblo a pueblo” hasta llegar a Guarenas. El jueves 1 de septiembre se concentrarán en el sector La Silla para entrar caminando a Caracas.