‘Señor no se detenga, siga derecho que si esos tipos se montan nos van a robar’’, dicen varios usuarios a bordo de una unidad colectiva de la línea Caracas – Los Teques que transitaba a la altura de los primeros kilómetros de la Panamericana. La previa advertencia de los pasajeros fue ignorada por el conductor del vehículo y como si se tratase de una profecía, los sujetos recién recogidos dieron la voz de asalto en cuestión de segundos, arrasaron con todo, sin siquiera dirigirle una mirada al chofer.
Este es parte del relato de Sergio Reyes, joven que iba a bordo del autobús que fue asaltado hace cuatro semanas en la mencionada vía expresa. El veinteañero que accedió a entrevistarse con el equipo reporteril del Diario La Región, denunció con cierta impotencia lo que a su juicio se trata de una complicidad entre antisociales y profesionales del volante.
Reyes, quien durante dicho atraco perdió su teléfono celular y un bolso personal, comentó que estos episodios son el pan de cada día de los usuarios de la línea, quienes incluso han llegado a discutir con el conductor de la camioneta para evitar que se paren a recoger a más pasajeros en la vía.
‘‘En aquel momento le advertimos al chofer que no se parara porque vimos a unos tipos de muy mal aspecto cerca del kilómetro 3; el señor nos ignoró y se paró alegando que si no recogía gente no iba a hacer suficiente dinero como para llevar comida a su casa’’, dijo.
Posterior a ello, lo peor sucedería. Cuatro sujetos armados hasta los dientes amenazaron a los ocupantes de la unidad, sin embargo, ‘‘hicieron como si el chofer no estuviera allí,’’. Según relató una de las víctimas del asalto, los delincuentes usaron sus armas de fuego para despojarlos de carteras, artefactos tecnológicos y demás pertenencias.
Por su parte, Irina Sánchez, fémina que religiosamente utiliza dicho transporte para viajar hasta su lugar de trabajo en Caracas, narró otra historia en la cual los profesionales del volante parecían estar encompinchados con los ladrones.
Esta vez el asalto fue perpetrado luego de la entrada al sector Lomas de Urquía, justo cuando tres sujetos de tez morena y 1.70 metros de altura, ataviados con suéteres y gorras se montaron en el colectivo luego que el conductor disminuyera la velocidad pese a los gritos y advertencias de las personas que viajaban en los primeros asientos.
‘‘No tardaron ni cinco minutos, pasaron por cada puesto, se dirigieron a cada persona con una pistola en mano para agilizar el proceso de entrega de pertenencias y luego le pidieron la parada al chofer, sin siquiera quitarle un billete de 10 bolívares’’, apuntó Sánchez.
Estos son solo dos de los muchos asaltos registrados dentro de estos autobuses, por lo que los indignados usuarios exhortaron a las autoridades policiales a investigar a los conductores y así determinar si realmente mantienen conexión alguna con estos piratas de carretera. Igualmente pidieron que la verificación de transporte que se realiza en territorio Guaicaipureño sea aplicado a lo largo de la Panamericana.
Importante denunciar
Asimismo, el comisario Oswaldo Villegas, jefe del Centro de Coordinación Policial nº1 de la Policía del estado Miranda (Polimiranda), señaló que en estos casos las víctimas deben formalizar la denuncia ante los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), institución encargada de la custodia de toda la carretera Panamericana.
‘‘En dichas denuncias deben especificar el modus operandi utilizado por los antisociales para robar y que a partir de allí los oficiales de la PNB puedan poner en práctica algún procedimiento que logre disminuir todos estos hechos delictivos a bordo de los autobuses’’, comentó.
Igualmente resaltó que a través de puntos de control la policía nacional monta guardia en la Panamericana.
Frederick [email protected] / @FredoCorleone_
