Luego de un impactante recorrido por festivales internacionales de cine, el respaldo de la crítica especializada y millones de espectadores a escala mundial, la película “El Abrazo de la Serpiente”, coproducida entre Colombia, Venezuela y Argentina, se estrena en las salas comerciales de todo el país el próximo 14 de octubre de 2016.
Ya son 43 los premios obtenidos por este film del cineasta Ciro Guerra en prestigiosos encuentros cinematográficos, incluyendo el Art Cinema Award (Quincena de Realizadores en el Festival de Cannes 2015), además de la nominación a la 88.a edición de los Premios Oscar de la Academia, siendo este año la única representante latinoamericana. Los críticos más destacados la han reseñado como “una película gigantesca y poética… de alta factura cinematográfica” (Variety), y como «una exploración visualmente hipnótica del hombre, la naturaleza y los poderes destructivos de colonialismo» (The Hollywood Reporter). La revista Rolling Stones la calificó “…como nada que hayas visto antes”.
El New York Times señaló: “…Belleza no es una palabra suficiente para describir sus escenas… El Abrazo de la Serpiente es un film potencialmente capaz de cambiar tu vida” y la publicación Taste of Cinema la incluyó entre los “15 mejores films más trascendentales de todos los tiempos” junto a películas de célebres Directores como Stanley Kubrick, Werner Herzog, Terrence Malick, Ingmar Bergman, Andrei Tarkovsky y Ken Rusell.
Hablado en 9 idiomas, incluyendo lenguas aborígenes, presenta una épica historia sobre el encuentro entre la civilización del hombre blanco y la cultura ancestral del hombre amazónico. Karamakate, el último chamán sobreviviente de su tribu, acompaña al antropólogo alemán Teo Von Martius y casi 40 años después al botánico estadounidense Richard Evans, en un viaje por la selva Amazónica en búsqueda de la Yakruna, una planta sagrada que podría curar sus males. Siendo una película de ficción, el Director Ciro Guerra no obstante se inspiró en los diarios que los científicos Theodor Koch-Grunberg y Richard Evans Schultes dejaron en la vida real como testimonio de su odisea amazónica.