“Dialogar: ¿con quién?, ¿por qué? y ¿para qué? Esas preguntas no encuentran respuestas en el ciudadano de a pie. Para todo demócrata el diálogo es la herramienta fundamental para dirimir cualquier diferencia. En la situación que vivimos hoy en día los venezolanos, el diálogo, sin el reconcomiendo de los errores, puede ser considerado como estéril”.
La declaración la da el concejal de Los Salias, Héctor Medina, presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara Municipal, quien recordó la lección que recientemente dieron al mundo nuestros hermanos colombianos. “Ellos quieren paz pero no con las condiciones injustas fijadas por el gobierno y las FARC. Hoy los venezolanos exigimos lo mismo: Queremos paz pero que haya reconocimiento y respeto de todos”.
“El pueblo venezolano habló en diciembre de 2015: hay una nueva realidad política en el país, el pueblo quiere cambio. Todo en el marco de la Constitución, por eso el pueblo exige reconocer a la Asamblea Nacional como máxima representación de la voluntad popular. También ve en el referendo revocatorio y en las elecciones regionales la posibilidad de manifestar su derecho a expresar su opinión a través del sufragio”.
El edil y primer vicepresidente de Copei Los Salias aseguró que los ciudadanos reclaman la imparcialidad de los órganos del Poder Público: Consejo Nacional Electoral, Tribunal Supremo de Justicia, Ministerio Público, Defensoría del Pueblo y Controlaría General del la República “porque son herramientas claves para superar la crisis moral institucional que atravesamos”.
Reiteró que “tenemos razones para dialogar, pero no con un gobierno que ha violado los derechos humanos de los venezolanos, que no es capaz de garantizar ni la harina de maíz, símbolo de nuestra identidad gastronómica, ni siquiera proveer los más elementales productos de higiene personal, ni mucho menos los indispensables medicamentos para salvar las vidas de sus ciudadanos. Todas las encuestas señalan que 8 de cada 10 venezolanos queremos un cambio y esto es lo que al gobierno le da miedo, por eso no quiere dialogar”./NDP