
Venganza o ajuste de cuentas es el móvil que más cobra fuerza en el asesinato de José Alí Sánchez Rivero, quien falleció en la sala de emergencia del hospital Victorino Santaella la madrugada de este lunes al ser tiroteado por sujetos desconocidos.
Se conoció en predios policiales que Sánchez, de 20 años, fue dejado a las puertas del hospital local. Recibió múltiples impactos de bala.
El occiso había sido detenido el pasado 30 de julio por Poliguaicaipuro, cuando
haciéndose pasar por evangélico con otro hombre perpetraban robos. Sus familiares esperaban la entrega del cuerpo a las puertas de la medicatura forense local.PDO/gf