Sus opciones van desde las típicas de un programa de su tipo, como la cancelación de ruido, cortar y pegar pistas de audio, entre otras
La empresa desarrolladora de software, Adobe Systems Incorporated, nos ha traído durante un largo tiempo programas de edición, visualización y reproducción, que hoy en días seguimos usando.
Y es que quien no ha usado Adobe Acrobat Reader para leer ese libro que tanto habías buscado y no habías podido encontrar en físico; cuando necesitabas, o querías aprender a editar imágenes, fotos o crearlas también, muchos terminamos usando para ello Photoshop, y como olvidarnos del ya retirado (o a las puertas de este), Adobe Flash Player, que podían hacerse animaciones y hasta páginas web que quedaban sorprendente, pero eso sí, muy pesada a la hora de cargarlas.
La cuestión ahora es que la empresa desarrolladora, ha dado a conocer su más nuevo software de edición de audio. Lo presentó durante la Adobe Max Creativity Conferences, que fue la situación ideal para que Adobe presentara, su nuevo programa bajo el nombre de Proyecto VoCo. Sus opciones van desde las típicas de un programa de su tipo, como la cancelación de ruido, cortar y pegar pistas de audio, entre otras. La cuestión por la que ha llamado tanto la atención es por su capacidad de hacer ediciones más realistas.
Se podría hasta decir que es impecable en ese sentido. Durante la demostración en la conferencia, uno de los desarrolladores encargados del proyecto VoCo, Zeyu Jin, dio a conocer el cómo en un documento de audio ya grabado, fue posible introducir nuevas palabras, de tal manera que pareciese que esta había sido dicha durante la grabación.
Y aún por más grandioso que pueda sonar o parecer esto, no se ha visto ilesa de recibir diversas opiniones, entre ella positivas como también negativas, y es porque la gente ve los problemas éticos que podría acarrear este. Claro, están los más burlones, los amigos de alguien que podría hacer una inofensiva broma como también una grabe, lo que es poner en “boca” de alguien palabras que nunca dijo. Pero claro que también está que no todo tiene que ser malo.
Imagina la posibilidad de que en un documento de audio en el que se ha trabajado tanto hay un error de pronunciación por parte de quien habla, y es un trabajo importante, que no amerita ningún problema por editar lo que se dice. Sería muy laborioso y molesto volver a rehacerlo todo y que no dañen la harmonía de lo que se escucha. Es una herramienta muy buena, que se le puede dar muy buen uso, pero como tal, queda a merced de las personas en cómo usarla.