El Primer ministro Benjamin Netanyahu dijo el lunes que la investidura de Donald Trump en Estados Unidos es una «oportunidad formidable» para Israel, pero pidió a sus aliados de derecha moderación.
Tras ocho años de «presiones enormes» ejercidas por la administración Obama a Israel sobre el tema de Irán y las colonias, «estamos frente a una oportunidad favorable para la seguridad y el futuro del Estado de Israel, pero eso exige sentido de la responsabilidad y prudencia de nuestra parte, para no perder esta oportunidad», dijo a los diputados de su partido, el Likud.
Netanyahu, que encabeza el gobierno más derechista de la historia de Israel, está confrontado al forcejeo de sus aliados.
Ellos ven en la llegada de Trump a la presidencia una oportunidad de continuar la colonización en Cisjordania y Jerusalén-Este, territorios palestinos ocupados, e incluso de anexar la mayor parte de Cisjordania.
Netanyahu declaró el domingo por la noche ante el consejo de ministros restringido que levanta todas las restricciones a la colonización en Jerusalén-Este, anexada y ocupada por Israel, ahora que Barack Obama, hostil a las colonias, dejó la Casa Blanca, informaron diferentes medios de prensa.
Netanyahu declaró que espera continuar la colonización en los grandes bloques de colonias de Cisjordania, según los medios.
AFP