El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de EEUU insistió este domingo en que aplicará la polémica orden del presidente Donald Trump que veta temporalmente la entrada de refugiados y ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, aunque cumplirá los fallos judiciales en contra de esa medida, reseñó EFE.
“El Departamento de Seguridad Nacional continuará haciendo cumplir todas las órdenes ejecutivas del presidente Trump de una manera que asegure la seguridad del pueblo estadounidense”, afirmó el DHS (siglas en inglés del Departamento) en un comunicado.
El magnate ha causado una enorme polémica y confusión, dentro y fuera de Estadios Unidos, con la orden ejecutiva que firmó el pasado viernes para luchar contra el terrorismo yihadista.
El decreto ley suspende tanto la entrada de todos los refugiados durante 120 días como la concesión durante 90 días de visados a siete países de mayoría musulmana con historial terrorista -Libia, Sudán, Somalia, Siria, Irak, Yemen e Irán- hasta que se establezcan nuevos mecanismos de escrutinio.
Ese veto provisional provocó este sábado el caos y la indignación en medio mundo, mientras numerosos viajeros veían bloqueado ya su acceso a territorio estadounidense y se producían protestas en varios aeropuertos de EEUU.
Una jueza federal bloqueó a última hora del sábado parte del polémico veto, en respuesta a una demanda de la Unión para las Libertades Civiles en América (ACLU) contra la orden ejecutiva de Trump, que puso en dudad su constitucionalidad.