
Desde hace algunos días conductores de transporte público en la ciudad están cobrando 150 bolívares aunque no está autorizado; alegan que los repuestos y mantenimiento de los autobuses es muy costoso, por lo que la ciudadanía en su mayoría ha aceptado y paga sin inconvenientes.
Luis Rojas, chofer de la línea La Matica, explicó que la situación del sector es bastante grave, ya que muchos compañeros han tenido que parar las unidades y quedarse sin ingresos por no tener plata para comprar los repuestos.
«Yo mismo me vi en apuros hace unas semanas porque un caucho se me dañó; el nuevo me costó 200 mil bolívares y en la proveeduría para variar no tenían». Rojas señaló que «el pueblo entendió lo que el ministro no ha podido, los repuestos están muy caros y no recibimos ayuda del Gobierno. La proveeduría casi nunca tiene nada y si les llega algo es para pocas unidades, por eso la situación es difícil. Decidimos aumentar a 150 bolívares y los usuarios lo han entendido, esperamos que pronto la municipalidad lo pueda aprobar».
Comentó que hay usuarios que se quejan, ya que indican que gastan mucho en transporte; sin embargo otros pasajeros hablan con ellos y entienden. Agregó que el alcalde de Carrizal, José Luis Rodríguez, informó que no han aprobado el aumento, por lo que lo instó a estudiar el ajuste.
El transportista mencionó que algunos compañeros sugirieron como medida de presión ir a paro, pero tal propuesta fue descartada porque afectaría al pueblo. Vale destacar que las rutas suburbanas también aumentaron, tal es el caso de la Los Teques – Maracay que paso de 700 a 1.200 bolívares.
Tito Súarez, usuario, relató que a diario toma seis autobuses, lo cual representa 600 bolívares cada día; aunque admitió que es otro golpe para el bolsillo de los venezolanos, reconoció que es necesario. «Los conductores son padres de familia que además de mantener las unidades deben llevar el alimento a los hogares, además no son responsables de la crisis económica del país».gf
Beatriz Hernández