
Para los más de 700 habitantes de Colinas del Ángel es toda una odisea llegar y salir de sus hogares; según la vecina Desiré Rojas, al día cuando mucho prestan servicio tres unidades de transporte.
Sin embargo resaltó que en la mayoría de las ocasiones es solo una la que no cumple la ruta completa; por eso los vecinos deben caminar largos trayectos hasta conseguir un autobús.
“Cobran lo que le da la gana, no cumplen los horarios y si estamos de suerte trabajan tres al día, pero casi siempre es una unidad, lo cual dificulta bastante la movilización de los habitantes de la barriada”, apuntó Rojas.
Destacó que muchas veces los vecinos deciden caminar para llegar puntuales a las labores; no obstante recalcó que la situación tanto de los estudiantes como de las maestras de la UERB Colinas del Ángel es crítica, ya que viven lejos y deben caminar largos trayectos.
Al igual comentó que ameritan a la mayor brevedad posible un operativo de asfaltado, ya que hay varios tramos dañados y hasta fallas de borde; hicieron tal solicitud al gobernador Henrique Capriles pero éste informó que no cuentan con tantos recursos para arreglar las vías, incluyendo corregir las fallas de borde.
Otro aspecto resaltado por la vecina es el problema de agua que padecen los residentes de una parte de Colinas del Ángel, ya que les puede llegar el suministro una vez cada 15 días; según Hidrocapital es por una falla que hay en una tubería matriz.
Mientras tanto Oliver Hidalgo consideró que el principal problema que tienen en la zona popular es la inseguridad desbordada; especificó que roban a toda hora, principalmente motorizados. Por eso a los taxistas no les gusta hacer carreras al sector.
Por la inseguridad desbordada instó a los integrantes de las policías tanto estadales como municipales a hacer recorridos y operativos para garantizar la tranquilidad en la comunidad popular. BH/gf