
Un total drama viven desde hace algún tiempo los pacientes con enfermedades como lupus, soriasis, artritis, cáncer y hasta los que han recibido trasplante de algún órgano, ya que a pesar de que en la sede del Seguro Social de Los Teques están todas las carpetas con las necesidades de los pacientes, los medicamentos de alto costo no llegan o lo hacen en pocas cantidades que no alcanzan para que todos cumplan su tratamiento mensual.
Además de la escasez, el IVSS anunció que están suspendidas todas las intervenciones quirúrgicas de trasplantes de riñón por la desaparición total de los inmunosupresores, medicamento necesario para evitar rechazo del órgano donado.
Cabe destacar que en el Distrito Capital cuatro personas están en proceso de rechazo de los hígados que les trasplantaron y uno está por perder el riñón porque la farmacia de alto costo, que depende del Instituto Venezolano de Seguros Sociales, no despacha los inmunosupresores que deben tomar de por vida para evitar la pérdida.
Un paciente que prefirió reservar su identidad por temor a represalias detalló que para cumplir con el tratamiento y no empeorar la condición de salud, va cada mes al Seguro Social de Los Teques y aunque llega muy temprano no siempre recibe todos los medicamentos que necesita, por lo que teme por su condición, ya que en Badan tampoco consigue lo prescrito por el doctor.
Precisó que aunque el problema no es nuevo en el IVSS de Los Teques, en los últimos meses la situación se ha tornado más crítica por la fallas de metrotexato, Umira y Plaquinol. También llegan con irregularidad y en pocas cantidades tamoxifeno, Valixa, Tlya y Cellcept.
Es de subrayar que los inmunosupresores tampoco llegan, lo cual angustia a los trasplantados, ya que pueden perder el órgano.
Como se sabe, la distribución de medicamentos de alto costo le compete al Estado a través del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), por lo que el deterioro del estado de salud de los pacientes es responsabilidad del Gobierno.
Ya han pasado 12 días desde que el nuevo ministro para la Salud, Luis López, conoció la suspensión del programa de trasplantes y desde que la directiva de la Fundación Venezolana de Donaciones y Trasplantes de Órganos, Tejidos y Células, adscrita a ese despacho, acudió otra vez para hablar sobre el tema, pero fueron recibidos por una asistente.
Las notificaciones no surgieron de la noche a la mañana. José Riobueno, presidente de Fundavene, explicó que el colapso del programa de procura y trasplante de órganos fue anunciado desde el 6 de enero a la exministra para la Salud, Antonieta Caporale, pero jamás se reunió con la fundación que ese despacho eligió para llevar el programa. El director del IVSS, Carlos Rotondaro, también tuvo en sus manos las notificaciones pero solo respondió que el ministerio debía autorizar los encuentros cara a cara.
Los trasplantes se reanudaron en agosto del año pasado, luego de 10 meses de paralización por falta de placas para hacer pruebas cruzadas que analizan si las personas son compatibles con los órganos, así como del líquido especial para preservarlos y de la garantía de que el IVSS abasteciera de inmunosupresores. Desde agosto hasta la fecha se trasplantaron 316 personas, las últimas 55 fueron en el primer trimestre del año: 7 recibieron un riñón de cadáver y otras 12 de un donante vivo; 28 recibieron córneas y otras 8 injerto de médula.gf
Beatriz Hernández