La mortalidad materna es uno de los indicadores más significativos en materia asistencial y es un factor sensible para evidenciar las condiciones del sistema de salud en un país.
Durante décadas en Venezuela, se venía dando una reducción sostenida de la mortalidad materna. Sin embargo, actualmente, según datos del Ministerio del Poder Popular para la Salud, la realidad cambió. En los últimos 19 años la tasa de mortalidad materna se ha incrementado 40%, lo que significa que al día de hoy, una embarazada, que no tenga control prenatal, tiene el riesgo de morir más alto que hace dos décadas.
En 2016, según el boletín epidemiológico correspondiente a la semana número 52 publicado por MinSalud, el número de muertes maternas registrado fue de 756, reportando un aumento de 65,79% respecto a 2015. Al respecto la directora general de Salud Miranda, Maggia Santi, calificó de “alarmante”, estas cifras.
“Este aumento puede haber ocurrido por el deterioro de la calidad en la atención de salud y de las condiciones del estado nutricional de las madres y sus recién nacidos. El entorno social actual está impactando negativamente en todos los estructuras del país. Esto requiere de una mesa de análisis de expertos en el tema para que Venezuela pueda superar esta crisis del sector salud”.
Santi indicó que el mayor riesgo está en adolescentes y en forma particular en las que tienen menos de 15 años.
Dos aspectos son claves en la medición que se hace para corroborar el nivel de asistencia: la atención de las embarazadas y la de los niños. Estos indicadores incluyen la atención preventiva, desde el control de la madre durante la gestación, las condiciones del nacimiento (parto o cesárea), y los siguientes cuarenta días, así como los del niño.
El deterioro
Las causas de la mortalidad materna en Venezuela son prácticamente las mismas en todo el mundo. Hemorragias, aborto, eclampsia o toxemia e infección severa. Pero otros factores externos influyen de manera significativa en este índice, como lo son: nivel educativo, desnutrición, violencia, embarazo precoz, hacinamiento, disposición de agua potable, entre otros.
En este sentido, la directora general de Salud Miranda, consideró que un aumento tan persistente como el que se ha experimentamos en Venezuela, no sólo se debe a la decadencia del sistema de salud, sino también el deterioro sustantivo de los servicios y de la calidad de vida de los ciudadanos.
El riesgo de morir de la maternidad, es decir, la probabilidad de que una mujerfallezca por esas causas es: 1 en 4.900 en países desarrollados y 1 en 180 en naciones como la nuestra. / Maria Carolina Naranjo
