NACIONES UNIDAS.-El diplomático Isaías Medina anunció ayer que dejó su cargo en la misión de Venezuela ante Naciones Unidas por su desacuerdo con las acciones del Ejecutivo de Nicolás Maduro, al que acusa de violar los derechos humanos.
Medina comunicó su dimisión en una carta en la que expresó su “divergencia irreconciliable con las actuaciones del Gobierno de Nicolás Maduro”.
En ella acusa a las autoridades de “reiteradas y sistemáticas violaciones a los derechos humanos” y de “crímenes contra la humanidad cometidos contra civiles durante los últimos 100 días”.
El diplomático, que era ministro consejero en la misión ante la ONU, defendió que Venezuela debe ser un país “donde se respete la vida, las garantías procesales y el debido proceso, sin sectarismos ni prebendas, donde impere el estado de derecho, la honestidad, la transparencia y el derecho a opinar diferente”.
“Un país libre de censuras, libre de presos políticos, con separación de poderes y alternabilidad democrática”, insistió en su escrito, en el que indica su “renuncia irrevocable” con fecha 14 de julio.
Además, en el último párrafo de su carta, Medina deja constancia de “la deuda de 3 meses” que asegura mantiene con él la misión y dice quedar “a la espera del pago de los costos de retorno incluyendo pasaje y equipaje de la mudanza para Venezuela conforme a la ley”.
El embajador venezolano ante la ONU, Rafael Ramírez, rechazó y condenó a través de su cuenta en Twitter la postura de Medina y sus palabras.
“Inmediatamente lo hemos relevado de sus funciones. No nos representa. Ha actuado de manera deshonesta”, señaló Ramírez.
/EFE