En “absoluto abandono” se declaran los habitantes de la parroquia Paracotos del Municipio Guaicaipuro, aseguran que las autoridades “tristemente” se concentran en el “maquillaje” más o menos permanente de la Plaza Bolívar; del resto, aseguran que el pueblo está sin alumbrado público, repleto de huecos y sitiado por derrumbes.
William Anseume, vecino de la popular parroquia, detalló que la luz se va casi todos los días por varias horas, “no hay paradas de transporte decentes ni un transporte medianamente eficiente; los servicios en general son un verdadero fracaso, las aceras se abandonan, cuando las hay: así, el cuido y el ornato público han desaparecido casi por completo”.
-Los huecos en las calles hacen intransitable cualquier sector de la parroquia, especialmente salir y entrar al pueblo se vuelve sumamente costoso por la cantidad de cráteres. Pero un problema mayor resalta a la vista, exponiendo a las personas y las vías en un inmenso peligro: los derrumbes que no han sido controlados desde las lluvias torrenciales pasadas.
Anseume agregó que en la carretera Paracotos-Tácata, “una vía nacional que muchas veces es usada en demasía cuando se presentan problemas serios de obstrucción en la Autopista Regional del Centro (ARC), o cuando ha habido inconvenientes con los huecos o derrumbes que son más o menos permanentes en esta vía, se ha venido desplomando el terreno, sin que esta acción de la naturaleza tenga alguna contención, recolección y adecuación por parte de autoridad alguna”.
-Aquí, la supuesta concejal pasea pero no hace, no ejecuta medida alguna por el pueblo, tampoco la acaldesa se ocupa en la parroquia de su trabajo y no hablemos del gobernador que se dedica a poner gente a cortar monte, pero no se ocupa de lo raigal. El cerro se viene abajo y la indolencia obviamente no sirve de nada para evitar que se obstruya en algún momento la carretera, frente al conjunto residencial Parque Paracotos, por poner un ejemplo dramático. Así, se tapan las torrenteras, se puede bloquear la vía definitivamente, se atropellan los cables de luz, teléfono e internet y los pobladores y sus vehículos corren riesgo inminente.
Pidió que alguien se ocupe de atender las necesidades de los paracoteños. “¿A dónde van los recursos de gobernación, alcaldía y concejalía que no se usan en lo indispensable de la atención física del pueblo?, se pregunta Anseume. “El cerro se vino abajo y se mueve a diario, sin atención oficial. Hay que darle un parado a esto, de inmediato, porque las consecuencias pudieran ser altamente lamentables para todos”.
Daniel Murolo
