Los venezolanos celebran los 155 años del nacimiento del doctor José Gregorio Hernádez, médico nacido en el estado Trujillo declarado ‘venerable’ por el Papa Juan Pablo II pero que el país ha esperado por más de 30 años su beatificación.
El epicentro de este día es el pueblo de Isnotú, lugar donde nació el ‘médico de los pobres’ y que actualmente alberga más de 26.000 placas de agradecimientos por favores concedidos.
En la celebración eucarística que se celebró en Trujillo, el obispo de la entidad, Oswaldo Azuaje exhortó al pueblo venezolano que a enfrentar «los problemas con el mismo espíritu que caracterizó al Dr. José Gregorio Hernández».
Además, reconoció que gracias al ‘venerable’ «la medicina en Venezuela fue ejemplo y pionera en América Latina».
Si bien la iglesia católica no lo ha declarado santo, para la mayoría de venezolanos ya lo es. Sobre su causa se ha conocido recientemente que “cumplió los requisitos”, según explicó a AVN, el presidente del Instituto Autónomo de Turismo del municipio Rafael Rangel, Édgar Parra.
Parra afirmó que están “en la etapa formal de verificar cualquier recaudo, por lo que estamos seguros que se cumplió todas las etapas”.
El pueblo venezolano centra sus súplicas en favores de salud, algunos aseguran que han sanado por la intersección del doctor, sin embargo, ningún prueba hasta ahora ha motivado a la Iglesia católica a declararlo santo.
